La Delegación Diocesana para la Pastoral con Jóvenes promueve un voluntariado en el Santuario de Nuestra Señora de Lourdes, del 28 de junio al 3 de julio para jóvenes de 16 a 30 años.
El delegado para la Pastoral con Jóvenes, Manuel Jiménez, ha informado que más adelante irán concretando las actividades, sin embargo, ha adelantado que “habrá espacio para la oración personal y comunitaria, para el servicio a los enfermos, para la convivencia entre los jóvenes que nos congreguemos y para la visita del santuario”.
Los interesados pueden hacer reservar su participación en este enlace, donde encontrarán además un primer desglose de la planificación por días. El precio de la peregrinación con alojamiento, comidas y transporte incluido oscila en los 365 euros.
“Animamos especialmente a párrocos y acompañantes de grupos jóvenes a considerar la oportunidad de peregrinar con su grupo, vivir esta experiencia con vuestros jóvenes puede ser una oportunidad para crear o consolidar el grupo. Lo ideal es la pertenencia a algún grupo parroquial, hermandad, movimiento, congregación o asociación y asistir con tu grupo o parte de él, además de con un responsable si sois menores. En cualquier caso, puedes interesarte y animarte por tu cuenta escribiendo a jovenes@archisevilla.org”
En esta línea, Jiménez explica que “realizar la peregrinación con la Hospitalidad como voluntario, además de nuestro compromiso como peregrinos también conllevará la disponibilidad para recibir alguna formación previa en la que se nos ayudará a entender cuál es la finalidad de la Hospitalidad de Lourdes y la labor del voluntario, además de ofrecernos orientaciones en cuestiones prácticas a la hora de acompañar a enfermos y personas con discapacidad durante la peregrinación”.
Hospitalidad Diocesana de Lourdes en Sevilla
La Hospitalidad de Lourdes en Sevilla, además de contribuir a la difusión de la devoción a la Santísima Virgen en su advocación de Lourdes, organiza una peregrinación anual al santuario de Nuestra Señora y trabaja pastoralmente en la ayuda a los enfermos, discapacitados físicos o psíquicos y cualquier persona que sufre en el alma o en el cuerpo, precisando para esta actividad de voluntarios dispuestos a acompañarlos.
“Por todo ello, este curso proponemos peregrinar con ellos como grupo joven voluntario. Conoceremos de cerca esta labor de acompañamiento y asistencia y brindaremos nuestra ayuda a los enfermos para que vivan con intensidad y profundidad esta peregrinación de la mano y al encuentro de nuestra Madre”, añade el delegado diocesano para la Pastoral con Jóvenes.