La Delegación de Pastoral Penitenciaria acerca la “grandeza que los cristianos celebramos como el Nacimiento del Salvador” a los privados de libertad. Para ello, destacan especialmente dos momentos durante estas fechas. El primero, la celebración de la Eucaristía por parte del Arzobispo, monseñor Asenjo, en Sevilla I; y de monseñor Gómez, en Sevilla II. Ambas tendrán lugar a las cinco de la tarde y estarán acompañados por los capellanes y voluntarios de los centros penitenciarios. También se celebrará una Eucaristía en el Centro Penitenciario de Mujeres de Alcalá de Guadaíra.
Según reconoce Pedro Fernández Alejo, Delegado de esta Pastoral, “este acontecimiento para los presos y presas supone revivir y añorar momentos de felicidad con la familia, por ello la Misa es vivida con emotividad y cargada de simbolismo religioso”. No en vano, la asistencia a las celebraciones supera el quince por ciento de los internos.
En segundo lugar, el 3 de enero, los Reyes Magos visitarán el CIS y la Unidad de Madre para dejarles sus presentes, especialmente a los niños que allí viven y que reciben “con grandísima expectación y misterio”. Un día más tarde, visitarán los centros de Sevilla I y Sevilla II para “llenar de ilusión” a los presos adultos.
El delegado diocesano quiere agradecer la colaboración de la Fundación de la Obra Social de la Caixa, de Caritas Diocesana, de la Fundación del Padre Leonardo, de Hermanadas y parroquias. Sólo con su ayuda “es posible llevar un poco de felicidad a más 3.500 personas privadas de libertad en las prisiones de Sevilla”.
