Este fin de semana se ha celebrado en Sevilla la octava edición del Encuentro de Pastorales Universitarias de las Diócesis del Sur (UDISUR). Los universitarios de la Archidiócesis hispalense, tanto del Servicio de Asistencia Religiosa de la Universidad de Sevilla (SARUS) como de la Asociación Celestino Mutis de la Universidad Pablo de Olavide, han organizado y acogido a los estudiantes llegados de Antequera, Cáceres, Granada, Jaén, Murcia y, por primera vez, Ciudad Real y Jerez.
La convivencia comenzaba la tarde del viernes con la bienvenida en la Casa de Cursillos de Cristiandad, la cena compartida y la presentación por grupos de los jóvenes. No obstante, fue la vigilia de oración celebrada esa primera noche la que marcó el inicio del encuentro y los días sucesivos. La vigilia giró en torno al lema, ‘Él conoce mi nombre’ (Salmo 91,14), “que supuso un verdadero momento de adoración y comunión”, explican fuentes organizadoras.
La jornada del sábado estuvo dedicada por la mañana a la conferencia sobre el futuro del hombre y el transhumanismo a cargo de Juan Arana, catedrático de Filosofía en la Universidad de Sevilla, invitado en el Foro Humanismo y Ciencia; y más tarde, al diálogo con profesores sobre diversos temas como la gestación subrogada, la eutanasia, los nacionalismos o la conciliación familiar. Por la tarde, tras visitar la Plaza de España y almorzar en el Parque de María Luisa, los jóvenes visitaron la Catedral de Sevilla y el Palacio Arzobispal, en el que el Arzobispo, monseñor Juan José Asenjo, ejerció como guía. Por la noche, los jóvenes disfrutaron de un momento de encuentro informal y distendido en el que celebraron un “talent show” con actuaciones variadas.
La mañana del domingo estuvo destinada a visitar el Hospital y la iglesia de la Santa Caridad, donde celebraron la Eucaristía, y a conocer la figura del Venerable Miguel Mañara. Tras el almuerzo finalizaba el octavo UDISUR, una edición “muy especial vivida con intensidad por la pastoral universitaria, por la dedicación y esfuerzo que su organización ha requerido y por la satisfacción de haber preparado un fin de semana lleno de cultura, amistad, encuentros y del amor de Dios”.
Ángela Tenorio
