Ha fallecido en Sevilla a la edad de 93 años Madre Araceli Martínez Álvarez, la que fuera superiora general de la congregación de Religiosas Terciarias Franciscanas del Tránsito y Asunción de Nuestra Señora, vulgo Pozo Santo, hasta en tres etapas. Nacida en Valverde del Camino (Huelva) el 28 de enero de 1922, ingresó con 22 años en la citada congregación, y su trayectoria ha sido encomiable, asistiendo a mayores necesitados en su residencia del Santísimo Cristo Varón de Dolores. Ha ejercido además como maestra de novicias, recorriendo las casas repartidas por la geografía nacional, para culminar en Sevilla su gran obra.
Ella fue la encargada de conseguir los medios para la complicada rehabilitación del Hospital del Pozo Santo. La restauración del edificio la llevó a cabo el arquitecto sevillano Alberto Donaire, siendo el importe de la reforma arquitectónica de 450 millones de las antiguas pesetas. El dinero fue aportado por un gran número de benefactores y sevillanos. Por ello, la congregación acordó levantar un museo de arte sacro en el lugar que antaño era la clausura para que se pudieran admirar; lienzos, esculturas, orfebrería, etc.., del antiguo hospital; piezas organizadas bajo la dirección del profesor José Roda.
Con este museo, madre Araceli cumplió su deseo de agradecer a todos los ciudadanos la colaboración que prestaron para realizar la gran obra de restauración y, de paso, dar a conocer este patrimonio de la Sevilla conventual oculta hasta entonces.
