El sacerdote y canónigo Francisco Navarro falleció el pasado domingo 21 de julio en su domicilio a los 69 años de edad tras una larga enfermedad.
Nacido en Sevilla el 13 de noviembre de 1943, fue ordenado sacerdote en junio de 1968. Doctor en Derecho Canónico, ha ocupado cargos de responsabilidad en la Archidiócesis a la que regresó después de prestar servicios en diversas representaciones pontificas. A su cargo como secretario general y canciller entre 1993 y 2002 le siguió el de párroco de Los Remedios hasta la fecha de su fallecimiento. Entre tanto, ha sido delegado de Administración y Patrimonio del Cabildo Catedral, y ha presidido la Fundación Forja XXI.
El martes, a las diez de la mañana, se celebró su funeral en la Catedral, presidido por el cardenal arzobispo emérito de Sevilla, mons. Carlos Amigo. El lunes 29 de julio tendrá lugar en la parroquia de Los Remedios, de la que ha sido párroco, una misa por su eterno descanso que tiene previsto presidir el arzobispo, mons. Juan José Asenjo, quien ha estado estos días en continuo contacto con la familia.