El misionero jesuita se encontraba en Japón. El padre Diego Pacheco López de Morla, sacerdote jesuita, ha fallecido a los 86 años de edad en la Colina de los Mártires, en la ciudad de Nagasaki (Japón). El padre Pacheco había tomado el nombre de Diogo Yuuki, en reconocimiento a uno de los 188 mártires que van a ser beatificados en Nagasaki el próximo día 24 de noviembre.
Nació en Sevilla, y a los 17 años ingresó en en la Compañía de Jesús. Desde el comienzo de su vida como jesuita pidió ser enviado como misionero a Japón. Allí ha vivido sesenta años, convirtiéndose en la máxima autoridad del “Siglo cristiano en Japón”. Fue destinado por el padre Arrupe para construir un centro de investigación del “siglo cristiano”y un museo de los Mártires en Nagasaki. Allí ha pasado toda su vida.
Manuel Portillo, Delegado de Misiones de la Archidiócesis de Sevilla, lo define como “un verdadero samurai a lo cristiano”, ya que “vivió su espíritu tan hondamente que todos hubieran pensado que se había impregnado bushidó crisitiano, el código que rige en los caballeros japoneses. Ese espíritu lo había aprendido en su familia y se lo llevó a Japón desde Sevilla”, afirma. En Japón era conocido como el especialista en la época de los mártires cristianos; de hecho, la beatificación de este grupo ha sido preparada en gran parte por él.
El domingo día 23 se celebró una eucaristía misionera en su memoria en la Casa Madre de las Hermanas de la Cruz.
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