El sacerdote de la Archidiócesis de Sevilla, Manuel Palma, ha escrito el libro La ambigua imaginación de la felicidad. En él un paralelismo antitético le da forma a los fragmentos de los Pensamientos de Blaise Pascal, al prolongar el movimiento paradójico de la naturaleza humana desde el divertissement hasta los pórticos de la conversión.
En el primer foco de la figura, la diversión, contemplada de un modo alegórico, por la cual el hombre se aleja de Dios y hace del mundo el objeto de su concupiscencia. En el otro foco, la conversión, en la que el hombre se aleja del mundo y se vuelve a Dios merced a un movimiento de la Gracia.
La concupiscencia es el envés del orden de la Caridad, como el divertimento es el reverso de la partida que abre a la fe cristiana. Las páginas de este libro retratan el trayecto del único «jugador » y dan razón de la complejidad de su existencia, que se debate entre el tedio, la angustia ante la muerte y el riesgo de una apuesta en la que la libertad empeña el todo de su nada en vistas a una ganancia infinita.
Manuel Palma
Sacerdote de la Archidiócesis de Sevilla. Estudió Filosofía en Sevilla, París y Roma. Doctor en Filosofía en la Pontificia Università Gregoriana (2011) y Licenciado en Teología (2006), por cuyo curriculum obtuvo el Premio extraordinario fin de carrera. Profesor de Filosofía en el Centro de Estudios Teológicos de Sevilla, del que es vicedirector (2012), y profesor invitado de la International Academy of Philosophy en España (2011). Ha publicado diversos artículos de carácter filosófico y teológico.