El alcalde de Sevilla ha tenido palabras de apoyo al colectivo de profesores de Religión Católica: «parece mentira que no tengan ni el tiempo ni el derecho a impartir su asignatura». Unas trescientas personas participan en este foro organizado por la Fundación San Pablo Andalucía CEU, la Asociación Católica de Propagandistas y la Archidiócesis de Sevilla.
El salón de actos del Campus universitario CEU Andalucía ha acogido esta tarde la sesión inaugural de las VIII Jornadas Católicos y Vida Pública, con la participación de unas trescientas personas que seguirán las sesiones de trabajo que se van a desarrollar hasta la tarde del sábado bajo el lema genérico ‘La familia, desafíos y esperanza’.
En el acto inaugural han participado el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido; el obispo auxiliar, mons. Santiago Gómez; el vicepresidente nacional de la Asociación Católica de Propagandistas, Emilio Navarro; el director general de la Fundación San Pablo Andalucía CEU, Juan Carlos Hernández; y el secretario del centro de Sevilla de la ACdP, Julio Álvarez de Toledo.
Hernández Buades ha explicado las razones por las que se ha elegido la familia como tema sobre el que van a girar las ponencias y mesas redondas de este año, y ha destacado el hecho de que este encuentro se haya consolidado con el paso de los años como un foro «de libertad y respeto absoluto al que no piensa como nosotros». «Lo que buscamos –añadió- es incorporar nuestra propuesta al debate público».
Zoido: «tener una buena familia es un privilegio que no tiene precio»
Por su parte, el alcalde de Sevilla ha destacado la familia como «principal pilar de la sociedad», hasta el punto de que «quien lo olvide está condenado al fracaso». En esta línea, subrayó que «tener una buena familia es un privilegio que no tiene precio». Ha recordado experiencias vividas en su propia familia –»ha sido mi gran referente»- para terminar afirmando que «debemos luchar por una familia unida y más acogedora posible».
Palabras de apoyo a los profesores de Religión Católica
Juan Ignacio Zoido ha hecho referencia también a la problemática que atañe al colectivo de profesores de Religión Católica: «parece mentira que no tengan ni el tiempo ni el derecho a impartir su asignatura». En este tema ha reconocido –»aunque suene políticamente incorrecto»- que desde el ámbito legislativo no se ha sido «más estricto» para tutelar los derechos de estos profesores. Ha finalizado su intervención con unas palabras de cariño hacia los responsables y profesores del campus CEU Andalucía, a quienes ha animado para que «sigan siendo la luz para muchos jóvenes».
El obispo auxiliar de Sevilla lamenta la cultura poco favorable a la familia
El obispo auxiliar de Sevilla ha destacado el hecho de que se aborden temas relacionados con la familia precisamente en un año eclesialmente marcado por dos sínodos de los que saldrán unas orientaciones referentes a esta institución. Ha agradecido el «sentir con la Iglesia» que demuestran los organizadores de estas jornadas al centrar los debates de este fin de semana en «algo que nos afecta a todos, la familia». Ha lamentado la cultura «poco favorable» a lo que representa la familia, y ha advertido que «de su bien depende el futuro de la sociedad y de la Iglesia». En este sentido, ha hecho hincapié en la responsabilidad de los creyentes en el estado actual que se percibe en torno a la familia, de manera particular en «la dimisión de muchos padres en la educación en la fe de sus hijos». «Este –subrayó- es uno de los principales problemas de la Iglesia».
Mons. Gómez Sierra ha finalizado su intervención recordando que, a pesar de algunos análisis, hay esperanza. Una esperanza que pasa por el acompañamiento de la comunidad eclesial a las familias, «sobre todo en las pruebas y momentos críticos». Un acompañamiento que ha podido comprobar en primera persona estos meses atrás, en el curso de las visitas pastorales que ha cursado a parroquias de toda la Archidiócesis, donde ha comprobado la ayuda que se presta desde las Cáritas parroquiales a las personas que pasan apuros. «La familia no está sola», concluyó.
«Es necesario ofrecer respuestas de esperanza»
Ha cerrado el turno de intervenciones inaugurales el vicepresidente nacional de la ACdP, que ha agradecido al alcalde y el obispo auxiliar de Sevilla su asistencia a las Jornadas, y ha recordado las referencias a la familia en el manifiesto final del Congreso Nacional Católicos y Vida Pública que se celebró en Madrid. En particular, «la necesidad de ofrecer respuestas de esperanza ante tanto vacío intelectual».
La primera ponencia de las Jornadas, titulada ‘La familia como bien social’, ha corrido a cargo de la secretaria académica del Instituto de Estudios de la Democracia, Ainhoa Uribe. Posteriormente se ha celebrado la primera mesa redonda sobre ‘Jóvenes, familia y matrimonio’ que ha moderado el periodista Francisco Correal con la intervención de dos psicoterapeutas, Mariano Hernández y Nieves González.