El Arzobispo de Sevilla, Mons. Juan José Asenjo, ha pedido a sus seis vicarios episcopales que establezcan la Adoración Perpetua en una iglesia de cada Vicaria. En su carta semanal, el prelado ha expresado su deseo de que sea factible esta iniciativa, al tiempo que ha pedido la implicación de las hermandades y cofradías en la misma. "Hagamos todos los esfuerzos que estén a nuestro alcance para visitar todos los días al Señor, adorarlo y acompañarlo", ha señalado el prelado.
Mons. Asenjo ha destacado la tradición eucarística de Sevilla -"pocas diócesis tienen unas raíces eucarísticas tan fuertes y hondas como Sevilla"- y ha recordado que la Adoración Perpetua cuenta desde hace seis años con un oratorio en la plaza Nueva, la capilla de San Onofre (en la imagen), ubicada frente a la parada del tranvía: "son centenares las personas que se han comprometido a acompañar al Señor una o dos horas a la semana, de día o de noche, y son centenares también los sevillanos que van o vuelven de sus quehaceres y que entran unos minutos en San Onofre para saludar al Señor".
Llamada a los sacerdotes a atender las confesiones
En esta carta ha subrayado también la importancia del sacramento de la penitencia, y ha pedido a sus sacerdotes que estén dispuestos a oír confesiones todos los días del año de ocho de la mañana a diez de la noche en San Onofre. Al respecto, ha hecho hincapié en la necesidad de que "toda Sevilla sepa que en esa franja horaria encontrarán un sacerdote dispuesto a reconciliar a los penitentes en el nombre y con el poder de Dios". Emplaza a los sacerdotes que lo deseen a que den su nombre, con el horario de su preferencia, al vicario general. Finalmente, el propio arzobispo se compromete a acudir a San Onofre todo los lunes, de ocho a diez de la mañana para oír confesiones.