Hasta el 30 de junio permanece abierto el plazo para presentar la declaración de la renta, una oportunidad para el contribuyente de destinar hasta el 1,4 % de sus impuestos a la Iglesia Católica y a distintos fines sociales. No en vano, desde hace años, la Iglesia promueve marcar las dos equis, porque este gesto sencillo no supone pagar más ni que nos devuelvan menos dinero, pero sí tiene una trascendencia importante en su quehacer diario.
Desde la Archidiócesis de Sevilla se ha animado, como en años anteriores, a marcar estas casillas. En esta ocasión, Teodoro León, vicario general, ha recordado en una carta enviada recientemente a las parroquias que “detrás de cada ‘X’ hay una historia que demuestra que la Iglesia siempre tiene la mano tendida para ayudar a las personas cuando sus vidas están rotas o están a punto de estallar. Así, este año se han elegido seis testimonios reales, casos particulares que a su vez son universales y que permiten poner rostro concreto y humanizar las cifras”.
Precisamente para hacer visible el servicio de la Iglesia a la sociedad, la Archidiócesis hispalense se suma cada semana a la Campaña Haz Memoria de la Conferencia Episcopal Española, desarrollada durante doce semanas en las que se trae a la memoria lo que es la vida de la Iglesia en los más variados ámbitos de su trabajo diario: desde el anuncio del Evangelio a la actividad socio sanitaria, la acogida a los enfermos, la catequesis de niños y jóvenes, la celebración de la Eucaristía, etc.
Así, a través de la publicación de reportajes de diferentes realidades diocesanas y de numerosos testimonios de personas que entregan lo que tienen para el bien de todos, la Iglesia en Sevilla quiere dar a conocer el fruto que puede dar marcar las dos casillas en nuestra declaración de la renta.
Porque “marcando la ‘X’ –continúa León en su carta- ayudamos a sostener la Iglesia en el desarrollo de sus actividades: la sustentación del clero, el anuncio del Evangelio, la vivencia de la fe y su inmensa labor asistencial y espiritual”. Ésta es, por tanto, “una decisión libre y democrática que no perjudica a nadie. De hecho, es de las pocas cosas que podemos decidir sobre nuestros impuestos. Si la dejamos en blanco, es el Estado el que decide por nosotros sobre esa pequeña cantidad”, advierte.
Por este motivo, insiste en la importancia de marcar la doble equis en la declaración de la renta e insta a los fieles que tengan dudas a consultarlas con la propia Administración diocesana (954 505 525).