Celebrado en el Seminario Metropolitano de Sevilla.
"Los cristianos laicos no podemos permanecer en silencio ante las duras circunstancias de muchos de nuestros conciudadanos desconcertados y empobrecidos, que sufren graves carencias materiales y espirituales. Nada hay en estos momentos más importante para nosotros que ayudar a aminorar las consecuencias de la crisis a través de iniciativas concretas, junto a ofrecer de nuevo a Cristo, El es el único que puede dar sentido a la vida de cada uno de nosotros y de toda la sociedad". Esta idea preside el comunicado titulado "Crisis económica & crisis de valores: no podemos permanecer en silencio" que se ha hecho público al término del Encuentro Diocesano de Laicos que se ha celebrado en el Seminario con la presidencia de los obispos de Sevilla, y en el que han participado unas 500 personas representativas de un centenar de instituciones eclesiales.
En este comunicado se ofrece "una respuesta de esperanza ante la crisis económica y financiera, que pone de manifiesto la verdadera crisis, la de los valores, la crisis moral, en el que el factor económico es más bien una consecuencia que un origen". Más adelante, se señala la necesidad de "recuperar el sentido de la unidad, unidad que tenemos que hacer visible en una sociedad que necesita el calor del Evangelio para alumbrar un tiempo nuevo. Nos sentimos -añade- complementarios en nuestra diversidad, sabemos que juntos podemos dar un testimonio creíble a nuestros contemporáneos para que el mundo crea".
El comunicado concluye ofertando un itinerario de formación madura en la fe y "un mensaje de confianza en el futuro": "ante las dificultades económicas y sociales ofrecemos nuestra colaboración, trabajo y esfuerzo para construir una sociedad más justa y solidaria".
Puede acceder al texto íntegro del comunicado en este ENLACE.