El pasado lunes, 9 de febrero, el arzobispo de Sevilla presidió la Eucaristía en la parroquia de santa María de la Cabeza en la sevillana barriada de san Diego, en la que bendijo la imagen del Cristo de la Misericordia, crucificado que ha sido donado por las Hermanas de la Cruz.
En la misma celebración se bendijo también un confesionario para la capilla penitencial y un cuadro pintado original a carboncillo con la imagen de san Juan Pablo II.