Conoce esta semana el testimonio de la familia Natera Fijo de la parroquia de San Miguel.
¿Cuáles son los pilares de vuestra convivencia familiar?
Pilares me suena, a lo fundamental, a los medios y herramientas que usamos para construir y desarrollar nuestra convivencia. Estos podían ser: intentar mantener un nivel de orden “espacial” mínimo (es bastante difícil en esta casa siendo tantos y siendo la casa tan grande). Pero en toda convivencia, lo más importante no es los fundamentos o pilares, lo más importante es LO ESENCIAL: el AMOR. Siempre se procura, no siempre se consigue, que nuestras actuaciones estén guiadas por el AMOR. Y si no lo han estado, y caemos en la cuenta, se intenta reparar esa mala actuación con el PERDÓN. Los valores con los que hemos crecido: La importancia de la familia, el AMOR, el servicio, la entrega a los demás, el trabajo y el esfuerzo, el saber perdonar, la fe, el gusto por estar juntos, el sabernos escuchados (¡aunque a veces no nos escuchen!), el disfrutar de la presencia del otro y sentirnos en todo momento “útiles” y en servicio.
¿Qué os ha aportado vuestra relación con Santo Domingo de Silos?
Mucho, en una doble vertiente. A través de los veranos que vivimos todos juntos en los Encuentros Misioneros Silos con otras familias compartiendo todo el día, todos los momentos, las oraciones, juegos, comidas, fiesta, trabajos… y a través de la oración con la comunidad, nuestra querida comunidad benedictina de los monjes de silos. Hemos convertido en nuestra casa a un pueblo que está a más de 600 km. Hemos descubierto más formas de vivir la fe, y que dedicar la vida por entero a Dios, entre las cuatro paredes de un monasterio, te puede convertir en la persona MAS FELIZ del mundo, siendo capaz de trasmitirlo a todo el que entra en contacto contigo. Nos sentimos acompañados y sostenidos por la oración de los monjes. Un nuevo enfoque a nuestra vida cristiana y la oportunidad de profundizar más en la fe.
¿Qué instrumentos tiene la familia de hoy para manifestarse cristiana?
Primero hay que intentar seguir el ejemplo de Cristo en todo lo que hacemos y en cómo lo hacemos, y luego hay que decir de palabra que lo hacemos así porque Cristo nos dijo que así lo hiciéramos, que no somos solamente “buena gente”, si no que intentamos ser “buenos cristianos”. Vivir todo lo que hacemos fuera de casa como familia, en nombre de la familia, alegres todos juntos o alegres por separado en todos los ámbitos en los que estemos. Poner Radio María, llevar una cruz al cuello, hablar de Jesús, aunque sea cuestionando o con duda. Siempre se está en búsqueda y pidiendo que crezca nuestra fe. Usando para todo ello las redes sociales.
La transmisión de la fe a los hijos es un reto para todos, ¿cómo lo hace la familia Natera -Fijo?
Apuntándonos a un bombardeo. Haciendo, desde pequeños, “obligatorias” las cosas que no son opcionales: misa los domingos todos juntos, sacramentos todos juntos, (confesión, unción de enfermos, bodas), colegio católico, catequesis en Parroquia y en colegio, Scout católicos, encuentros misioneros silos, Master de pastoral familiar, coro parroquial, teen star, …., Intentando dar ejemplo con nuestra vida y nuestra oración. Pidiendo en la oración fe para nosotros, nuestros hijos y el entorno. Edu, nuestra madre y esposa dejó escrito que debíamos estar en el mundo dando todo día a día lo mejor que sabemos y podemos “poniendo en juego todos los valores y capacidades que El Señor nos dio, como si trabajáramos en la empresa más prestigiosa del mundo”.
¿Cuál es vuestra parroquia?, habladnos de vuestra vida en comunidad.
Actualmente, San Miguel Arcángel. Allí vivimos nuestras celebraciones de eucaristía apoyando el coro. Allí vamos a catequesis de postcomunión. Allí nos formamos en el grupo de matrimonios y colaboramos en catequesis prematrimoniales compartiendo. Para Edu allí han dejado “nuestro testimonio, que es de mucha pobreza sobre todo para los parámetros en que se mueve nuestra sociedad. Hablándoles a los novios de que inician un camino que es precioso y que conduce a Vida Eterna, feliz y plena, pero que se construye día a día a base de esfuerzo, sacrificio, olvido de uno mismo y entregar la vida para hacer posible la de tu esposo y los hijos”.
¿Cómo imagináis la Iglesia del futuro?
Creativa, muy creativa y cada vez más por la nueva situación higiénico-sanitaria que se ha desencadenado. Utilizando nuevas tecnologías. Más abierta y comprensiva. Cerca de los más necesitados, de los que nadie escucha En palabras de Edu, “se ha de llegar a todos y ¡compartir la alegría de haberse encontrado con Cristo! No se trata de ir como quién impone una nueva obligación, como quién se queda en el reproche o la queja ante lo que se considera imperfecto o insuficiente.
Fecha y lugar del matrimonio: 1-12-1990 en la Parroquia de San Nicolás de la Villa Córdoba
Número de hijos y edades: Clara 28 y su esposo Rafa, Carlos 26 y su esposa Irene, Gracia 24, Antonio 22, Juan 21, Gloria 14, Estrella 13, Domingo de Silos 12. Y tres más en el cielo.
Un momento de vuestra historia familiar: Bodas de plata: por celebrar que durante ese tiempo y para el resto de su vida Cristo es faro y guía de esta familia (aunque a veces nos cueste un poco reconocerlo), Una Eucaristía con nuestra madre demostrando fuerza y valentía y nuestro padre, amor y puerto seguro. Celebrando en el campo la comida de fiesta. No necesitamos más. Juntos, con Él, todo es una fiesta.
Una actividad que comparte la familia en su tiempo libre: ¡Hacer el tonto!. Jugar, ver alguna película, vacaciones juntos en la playa, en el campo y en Santo Domingo de Silos .Pasear hasta casa de la abuela y allí empacharnos a base de “porquerías”, charlando de todo y de nada para arreglar el mundo. Cocinar, hacer deporte. La música.
Qué cosas no dejáis de hacer juntos cada día: Procuramos: comer o cenar juntos, sobre todo los fines de semana. Bendecir la mesa y rezar por la mañana todos los días, pero sobre todo los domingos preparando la Eucaristía. Y ¡Hablar, claro, disfrutando los unos de los otros!
¿Rezáis por algún sacerdote?: Por muchos: Los de la parroquia de San Miguel Arcángel (actuales y anteriores), San Andrés, San Nicolás de la Villa, San Pablo y los del Monasterio de Santo domingo de Silos (Burgos)
