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«Trabajemos todos por la paz, la convivencia y el progreso»

La Santa Iglesia Catedral ha acogido la misa funeral por las víctimas mortales de la pandemia presidida por el obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, quien ha recordado la necesidad de orar por nuestros hermanos difuntos.

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Un nutrido grupo de autoridades de la ciudad y fieles de la Diócesis se han congregado en la tarde del miércoles, 10 de junio, para celebrar la santa misa en recuerdo a las víctimas mortales de la pandemia. El Obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernández, ha querido oficiar esta eucaristía tras vivir, como ha puesto de manifiesto en su homilía, unos días “muy amargos y muy duros”, en los que hemos visto la muerte muy de cerca. “La muerte tan frecuente y abundante de tanta gente ha sido para todos un mazazo fuerte y así lo hemos vivido y lo estamos viviendo, puesto que estos días nos han hecho reflexionar lo débil que es la vida humana”, ha explicado el prelado quien ha resaltado que celebrar esta misa y orar por nuestros difuntos “es un deber de caridad cristiana y de justicia”. Asimismo, ha recordado que “la vida es para vivirla, disfrutarla y gastarla en el servicio de los demás, aunque cuando la muerte viene de esta manera tan cruel siempre nos parece injusta, pero la fe nos dice que la muerte no la ha inventado Dios, sino que Dios genera la vida”.
El pastor de la Diócesis ha querido reflejar la importancia de la oración en estos duros momentos, que “nos abre un portillo de luz y de esperanza”, puesto que ante una situación tan dolorosa, “solo la fe puede enjugar nuestras lágrimas”.
“Trabajemos todos por la paz, la convivencia y el progreso y desde la fe cristiana aportemos cada uno lo mejor de si mismo. Hemos recibido tantos testimonios de personas que han puesto su vida en riesgo o incluso la han perdido, hemos asistido a un desastre colectivo, pero también a un testimonio precioso de amor y solidaridad, fraterno, que ha brotado de tantos corazones; por ello, seamos todos solidarios ahora más que nunca, las instituciones, la Iglesia, el Ayuntamiento, Diputación, autoridades autonómicas y del Estado, para que nadie se quede sin recursos”, ha instado el Obispo al culminar su homilía ante un gran número de fieles que han asistido a la celebración cumpliendo en todo momento las medidas sanitarias y de seguridad establecidas.

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