El 11 de octubre de 2020 no iba a ser un día cualquiera. Es la fecha que perdurará en el corazón y en el imaginario de todos los hermanos de la corporación capuchina. Una fecha que anunció Mons. Demetrio Fernández como día para la coronación de la Paz y Esperanza. Tras un largo camino recorrido durante más de cuatro años, nadie podía presagiar que una pandemia iba a provocar la acertada, pero a la vez dolorosa, suspensión de ese acto de amor y reconocimiento a la devoción de nuestra Señora. Toca esperar, y mientras tanto, debemos ahondar en nuestra fe y permanecer junto a aquel que más lo necesite, para que así, una vez más, Córdoba siga siendo “Corona de la Paz”.
Sarai Herrera
Miembro de la comisión pro-coronación de María Santísima de la Paz y Esperanza