En la asamblea de Acción Católica General, el Obispo de Córdoba, monseñor Demetrio Fernánez, trazó las líneas prioritarias de acción para este curso y se entregó el material de formación para los grupos parroquiales de este año.
“Haciendo realidad el sueño de Dios” es el lema que la Acción Católica General (ACG) mantiene este año en el que además se celebra el décimo aniversario de la reconfiguración de la nueva Acción Católica General. “Hace diez años que los Movimientos Generales de ACG de adultos, jóvenes y niños se unieron en este nuevo proyecto que impulsa la Conferencia Episcopal como respuesta a la necesidad de articulación cada vez mayor del laicado parroquial y diocesano, por lo que esta cita estuvo marcada por esta celebración”, explicó el presidente de la ACG, Salvador Ruiz, quien acompañó al Obispo en la mesa presidencial de la Asamblea anual de Acción Católica celebrada el pasado domingo, en el salón de actos del Palacio Episcopal. Una cita en la que el pastor de la diócesis quiso poner de manifiesto nuevamente su deseo de ver en todas las parroquias un laicado unido, invitando a los asistentes a prepararse para dos eventos fundamentales como serán el Sínodo de los Jóvenes y la próxima beatificación de los mártires cordobeses, “en la que contamos con el testimonio de laicos que supieron dar la vida por el Evangelio, amando hasta el final y sabiendo perdonar”, afirmó.
Igualmente, el sacerdote Florencio Muñoz, viceconsiliario de ACG, recordó que como miembros de la Iglesia, “tenemos que ser Apóstoles del Evangelio y responsables de la tarea de evangelización a la que estamos llamados”. “Trabajamos como un suelo cuerpo dentro de la parroquia. No somos diferentes al resto de la comunidad parroquial, sino que aglutinamos todos los miembros y grupos de la parroquia”, indicó.
Seguidamente, los asistentes se trasladaron a la Catedral para celebrar la misa de acción de gracias por su décimo aniversario. La eucaristía estuvo presidida por monseñor Demetrio Fernández, que durante su homilía aseguró que la «vida cristiana es preciosa» y hay que «alimentarla en los sacramentos». El prelado recordó a los asistentes de la Acción Católica General que deben de «expandir la fe y vivirla en comunidad».
