El párroco quiere mantener, así, activa la fe en sus tres parroquias, a pesar del confinamiento, y ya prevé otras actividades y catequesis para realizar a través de Facebook.
El estado de alarma, decretado en todo el país por el Gobierno, ha llevado a la población a quedar en cuarentena generalizada, confinados en casa, para evitar el contagio del virus Covid-19. Esta situación, llevó al obispo de Guadix, como a los demás obispos de España, a decretar la supresión de las Misas con fieles en las parroquias de la diócesis, ante la necesidad de evitar la concurrencia de personas y la imposibilidad de asistir. También se dispensó a los fieles de celebrar la Misa en domingo y en los días de precepto, como el día de San José, que ya se acerca.
Esta realidad, que nos ah sobrevenido por sorpresa, ha disparado el ingenio y los recursos para poder vivir la fe desde casa y poder compartirla con otros, aunque no nos veamos en el templo. La posibilidad de seguirla por radio y televisión, o por internet, son solo algunos recursos que se nos ofrecen y que están disponibles para todos.
También, en las parroquias, han surgido iniciativas para mantener viva la identidad parroquial y compartir la fe. Una de esas parroquias es la de Aldeire, desde las que se retransmite la Misa a través de Facebook para este pueblo y para Dólar y Ferreira, que son las tres parroquias que lleva el sacerdote Javier Jiménez.
Javi, que es como quiere el párroco que le llamen, celebra la Misa cada día, en streaming, a través de la página oficial de Facebook de sus tres parroquias: https://m.facebook.com/parroquiaaldeire.dolarferreira.
Cada día, desde el pasado domingo, numerosos fieles de sus tres parroquias, y de otros muchos puntos de España y del mundo, siguen la celebración de la Eucaristía en Aldeire, a través de esta conocida red social.
Además, de la celebración de la Eucaristía, el párroco quiere realizar otras actividades, con el objetivo de mantener la mente y la fe activas: conciertos didácticos de música sacra en directo -el párroco es músico-, catequesis, etc.
Igualmente, para hacer un poquito más llevadero el confinamiento, el párroco ha instalado unos altavoces en la torre de la Iglesia y, cada día, a la hora del Ángelus, se pone música para acompañar la oración, una iniciativa muy bien acogida por un pueblo que cada día espera que lleguen las 12:00 para comenzar a escuchar la música que anuncia el Ángelus.
Las redes sociales, en esta ocasión, se han convertido, sin duda, en un aliado de las parroquias para estos días o semanas de confinamiento.