El obispo de Guadix, D. Francisco Jesús Orozco, entregó el cáliz profanado por los yihadistas a la diócesis de Córdoba al finalizar la Misa de 12, en la catedral accitana. Fue la última celebración con este cáliz en la diócesis de Guadix, después de que fuese recibido el pasado martes 6 de octubre y recorriese varias parroquias ayudando a rezar y ofreciendo el testimonio del horror de la guerra y la persecución.
Se trata de un cáliz tiroteado por los yihadistas, recuperado de los escombros de una iglesia en el norte de Irak y que la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada recuperó para que quedara como testimonio del horror y llamada a la oración. El cáliz está siendo llevado a numerosas diócesis del mundo y esta semana pasada ha estado en la de Guadix.
Fue recibido el martes en la catedral accitana y pasó ese día por los colegios de la Presentación y la Divina Infantita. También fue llevado a la parroquia de Cúllar. El miércoles viajó a la parroquia de Villanueva de las Torres, el jueves a Baza, el viernes a Dólar y Lanteira, el sábado volvió a Guadix y el domingo día 11 fue despedido en la catedral.
Durante al celebración de la Eucaristía, los responsables de Ayuda a la Iglesia Necesitada en la diócesis de Guadix, Emilio García y Olalla, presentaron lo que hace esta fundación pontificia e invitaron a rezar por los cristianos perseguidos en el mundo.
De la diócesis de Córdoba se desplazó hasta Guadix una representante de Ayuda a la Iglesia Necesitada en Córdoba, María, que se llevó el cáliz a esa diócesis, donde permanecerá dos semanas recorriendo, como en Guadix, numerosas parroquias y ayudando a rezar.
Antonio Gómez