Hoy es el día del Domund, el domingo mundial de las misiones. Es el día en el que la Iglesia nos invita a sentirnos misioneros ayudando a los que dedican su vida a la misión, generalmente en lugares muy necesitados y lejanos. También, nos recuerda esta jornada que la Iglesia es misionera y que, si quiere seguir siendo Iglesia del Señor, no puede olvidar nunca su condición de misionera. Porque la iglesia nace con el encargo de anunciar el Evangelio a todo el mundo: a los de cerca, a nuestra familia, nuestro pueblo… pero también a los de lejos, incluso en países muy lejanos.
Y eso es, fundamentalmente, lo que hacen los misioneros: irse lejos para llevar la alegría de la salvación y hacer presente el amor de Dios y el de los cristianos, con todas esas obras que sabemos que realizan para la promoción humana en hospitales, escuelas, centros de acogida,…
La jornada del Domund, que este año vienen marcada por la pandemia, invita a tener muy presente la misión de la Iglesia en el mundo, especialmente hacia los que no conocen del todo a Jesús. Y también es un día para recordar a tantos misioneros, decenas de miles, que hay por el mundo, llevando la alegría del Evangelio, celebrando la fe y haciendo visible el amor de Dios y de la Iglesia en la ayuda a los más necesitados. Los hospitales, centros de salud, escuelas, centros de acogida y formación profesional,… que crean los misioneros, no son más que expresiones de ese amor hacia el prójimo.
Carta pastoral
El lema de este año, con el que desde Obras Misionales Pontificias quieren motivarnos, es “Aquí estoy, envíame”, en alusión a la vocación especifica de los misioneros, que lo dejan todo para irse lejos, enviados por Dios y por la Iglesia. Y, sobre este eslogan y nuestro compromiso misionero como Iglesia, habla el Obispo de Guadix, Mons. Francisco Jesús Orozco, en la Carta Pastoral para el Domund: “ nuestra oración, nuestro tiempo y nuestro dinero se convierten en tres pilares privilegiados para hacer concreto este compromiso con la Iglesia misionera…… Esta jornada del Domund pide a la Iglesia que se siga arrodillando a curar heridas, a aliviarlas con el óleo de la consolación, a no caer en la indiferencia humillante para los pobres. Casi la mitad de la población mundial vive en los territorios de misión, donde se celebra uno de cada tres bautismos del mundo; donde un sacerdote atiende a más del doble de habitantes que otro sacerdote en la Iglesia universal y donde la Iglesia, a través de miles de instituciones sociales y educativas, llega a las aldeas más remotas para que Jesucristo pueda seguir curando y salvando”
También, el nuevo director delegado de Misiones, Sebastián Robles, ha hablado del Domund y de la vocación misionera de la Iglesia en un vídeo que ha distribuido a través de las redes, animando a todos a ayudar a los misioneros desde aquí. Y es que, en todas las parroquias, se hará una colecta para ayudar desde casa a los que están lejos en la misión.
Antonio Gómez