Finalizada la marcha solidaria el domingo 31 de mayo, solemnidad de Pentecostés, la gran fiesta del Espíritu Santo que impulsó a los apóstoles a ser testigos de su fe con sus palabras y obras, el Secretariado de Infancia y Adolescencia desea agradecer a todos, colaboradores y participantes vuestra generosa colaboración con “Zapatillas Solidarias”.
Nos hemos puesto en marcha y entre todos hemos recorrido 2.900 km y 656 m; 461 horas 2 minutos y 15 segundos. El contador estaba feliz de ver cuántos kilómetros de solidaridad a lo largo y ancho de nuestra tierra jiennense, cuántas horas de camino dedicadas al prójimo. Más de setenta colaboradores y 978 participantes de todas las edades, niños, adolescentes, jóvenes y adultos, deportistas humanitarios con un gran corazón.
Hemos realizado una sencilla aportación, hemos puestos nuestro granito de arena, acogiendo así las palabras del Señor “Dadle vosotros de comer” (Lc 9.13).
Bajo el lema “CONTAGIANDO ESPERANZA” hemos salido de nosotros mismos, nos hemos aproximado a los hermanos necesitados de Jaén y de los países empobrecidos. Esta actividad deportiva y fraterna nos ha recordado que ésta ha de ser, una actitud permanente en los hombres de buena voluntad, en los amigos de Jesús de Nazaret que pasó haciendo el bien. Con la fuerza del Espíritu que nos capacita a seguir a Cristo en el amor y en el servicio a los demás, nosotros, como los apóstoles y tantos creyentes a lo largo de la historia, somos enviados a continuar la misión del Maestro, entre otras tareas, la de ayudar a los pobres y necesitados.
Entre todos hemos conseguido la hermosa cantidad de 6.300 euros, kilómetros y horas de esperanza que como indicaba la convocatoria serán destinados a Cáritas Diocesana y Manos Unidas.
“Zapatillas solidarias” ha concluido, pero prosigue la marcha de continuar preocupándonos por los indigentes, como hermanos, miembros de la gran familia universal, especialmente en esta dura y dolorosa situación provocada por la pandemia.
El Papa Francisco en el Rosario del pasado sábado pedía a la Virgen: “Querida Madre, haz que el mundo crezca en un sentido de pertenencia a una única y gran familia, en la conciencia del vínculo que une a todos, porque con un espíritu fraternal y en solidaridad acudamos en ayuda de las muchas pobrezas y situaciones de miseria”.
Con el mejor deseo para todas las entidades colaboradoras y para todos y cada uno de los participantes, recibid junto a nuestro más profundo agradecimiento, un saludo muy cordial.
Secretariado Episcopal de Infancia y Adolescencia
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.