En las calles y plazas de los diferentes municipios del arciprestazgo de Baeza, en medio del ruido, prisas, luces y música de los días de Navidad, colgaba un sencillo cartel con fondo blanco y letras negras que preguntaba: ¿No has descubierto que te ama?
Así Dios, a través de los jóvenes del arciprestazgo, se valió para llamarlos a su presencia en los primeros días del año, donde en la Iglesia del Convento de Santa Catalina de Alejandría, tendría lugar una oración para jóvenes, donde se pretendió atraer a todos esos adolescentes y jóvenes, que han dejado de mirar a Cristo o simplemente, no han descubierto aún que Él vino por amor y para darnos su amor.
Con esta oración para jóvenes, el secretariado arciprestal de juventud, se quiso poner en camino en los primeros días del año, abriendo una nueva senda de apostolado, para así, renovados por Cristo, marcar un nuevo horizonte que sirva de revulsivo entre los corazones de los más jóvenes.
Era necesario descubrirle a Cristo, era necesario manifestar su amor y por ello, todo se centró en su presencia en cuerpo, sangre, alma y divinidad. Era necesario que aquellos más alejados tuvieran experiencia de Cristo y por ello, se intercalaron reflexiones, con silencios y música.
Así pues, se trató de una experiencia positiva y enriquecedora, donde el templo de las clarisas franciscanas se llenó contra pronóstico de jóvenes, sedientos de Cristo, donde también hubo momento para el sacramento de la reconciliación.
Finalizada la oración, tuvo lugar una convivencia en los locutorios, donde los adolescentes y jóvenes intercambiaron saludos, impresiones, vivencias y risas con la comunidad, sacerdotes, diacono y asistentes.
José García Checa
Baeza