La Diócesis de Cádiz y Ceuta informa que, con motivo de la celebración de las festividades del Día de Todos los Santos (1 de noviembre) y el Día de los Fieles Difuntos (2 de noviembre) y se han fijado horarios extraordinarios para la apertura de los cementerios parroquiales, con el fin de facilitar la visita de fieles y familiares a sus difuntos.
Los horarios para los días 1 y 2 de noviembre son los siguientes:
Cementerio de Vejer de la Frontera: abierto de 09:00 h a 18:00 h.
Cementerio de Benalup‑Casas Viejas: abierto de 09:00 h a 18:00 h.
Cementerio de Zahara de los Atunes: abierto de 10:00 h a 18:00 h.
Cementerio de Conil de la Frontera: abierto de 09:00 h a 18:00 h.
Se ha cumplido un año de la tragedia provocada por las lluvias torrenciales de la DANA, con graves inundaciones en distintos puntos de la geografía española, sobre todo en la Comunidad Valenciana y también en Letur (Albacete), Mira (Cuenca), Málaga y Jerez.
En el caso de Granada, Cáritas Diocesana ha recibido 300.445’44 euros a través de 682 donaciones, la mayor parte de ellas en lo que quedaba del año 2024, pero también una importante cantidad en este 2025. “Fue un desastre de dimensiones tan enormes, que nos sacudió a todos como sociedad y generó un gran movimiento de solidaridad que se ha mantenido en el tiempo”, explican en Cáritas Diocesana Granada.
“Aunque las donaciones fueron mucho más intensas en los primeros días, se han mantenido desde entonces hasta la actualidad”, señalan. Esto “refleja el compromiso solidario y la movilización de la sociedad granadina”, afirma la directora de Cáritas Diocesana de Granada, Luisa Mª Maeso. Si una semana después del desastre las donaciones se situaban en algo más de 60.000 euros y, cumplido un mes, esa cifra ascendía hasta 238.519,81 euros, una vez transcurridos seis meses el total se cifraba en 284.692,41 euros, cantidad que se ha incrementado en casi 16.000 euros en los últimos seis meses (en concreto, en 15.936,61 euros recibidos a través de 27 donantes), según los datos de Cáritas Diocesana.
Las diferentes donaciones recibidas se transfieren a Cáritas Española bajo el concepto “Inundaciones” para que, desde allí, se destinen a cubrir las diferentes necesidades que van surgiendo.
EL VALOR DE LAS DONACIONES ECONÓMICAS
La realidad es que las necesidades de los territorios afectados han ido cambiando a medida que los días, las semanas y los meses han ido avanzando. Por eso, la campaña puesta en marcha por Cáritas es de captación de fondos, una fórmula mucho más eficiente porque facilita la adquisición de productos adecuados a las necesidades de la población en cada momento y, además, permite la compra en mercados locales, lo que contribuye a la activación de la economía en las zonas afectadas. Sin olvidar que esta opción evita costes adicionales y dificultades logísticas.
El acompañamiento de Cáritas sobre el terreno ha tenido siempre un enfoque integral, porque no se trataba sólo de entregar recursos, sino de reconstruir vidas con dignidad, por lo que se atienden necesidades desde un enfoque económico, social, psicológico y humano con una mirada a largo plazo.
PLAN DE RESPUESTA A LA EMERGENCIA
Como en cada acción que lleva adelante Cáritas, el foco ha estado en los grupos que se encuentran en mayor situación de vulnerabilidad: personas mayores, menores, jóvenes, familias numerosas, personas migrantes, y quienes viven en soledad -sin redes de apoyo- o ya se encontraban en situación de exclusión antes de la DANA.
Las Cáritas de Valencia, Letur (Albacete), Mira (Cuenca), Málaga y Jerez han logrado acompañar a través de sus centros, proyectos y parroquias a 21.888 personas con una inversión total de más de 28,5 millones de euros. Los esfuerzos se han centrado en la restitución de los medios de vida de las personas afectadas a través de la recuperación de negocios y la rehabilitación de locales y medios de trabajo. También se ha trabajado en el realojamiento de familias, reacondicionamiento y equipamiento de viviendas; atención psicosocial, apoyo jurídico y reorganización de los propios centros y proyectos de Cáritas.
En la sala de exposiciones de la Curia Metropolitana de Granada.
Ayer se inauguró la exposición “Curar, Aliviar, Confortar”, organizada porla Asociación de Antiguos Alumnos de la Facultad de Medicina de Granada y el Centro Cultural del Arzobispado de Granada.
El acto contó con la presencia de nuestro arzobispo Mons. José María Gil Tamayo, el rector de la Universidad de Granada, el Delegado de Sanidad de la Junta de Andalucía, el decano de la Facultad de Medicina y el director de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Facultad de Medicina.
Todos ellos expresaron su agradecimiento por hacer posible la exposición y subrayaron la relevancia de que tenga lugar en la Curia Metropolitana, sede histórica de la Facultad de Medicina durante 250 años, la más duradera de las seis que ha tenido la ciudad de Granada.
En la presentación se destacó la presencia del manuscrito de Carlos V, que confirma la fundación de la Universidad, así como la bula papal que lo abala, piezas de gran valor histórico y simbólico.
La exposición permanecerá abierta al público de lunes a viernes en horario de 10:00 a 14:00 h, los jueves de 17:30 a 19:30 h y los sábados de 11:00 a 14:30 h. Estará cerrada los días festivos, excepto los sábados.
El sacerdote y periodista Antonio Gil nos recuerda esta semana las bienaventuranzas de Papa Francisco
Noviembre alza el telón de dos grandes celebraciones litúrgicas: El día de Todos los Santos y la Conmemoración de los fieles difuntos. En palabras del Papa Francisco: “Los santos y santas que celebramos son personas que han vivido con los pies en la tierra, que han experimentado la fatiga cotidiana de la existencia con sus éxitos y sus fracasos, encontrando en el Señor la fuerza de volver a levantarse y continuar el camino”. Francisco nos dejó lo que él llamaba “bienaventuranzas modernas”, calcadas del Evangelio:
“Bienaventurados los que ven a Dios en cada persona y se esfuerzan por que otros también lo descubran.
Bienaventurados los que protegen y cuidan nuestra casa común.
Bienaventurados los que renuncian a su propia comodidad para ayudar a los demás.
Bienaventurados los que rezan y trabajan por la propia comunión entre los cristianos.
Bienaventurados los que miran a los ojos de los abandonados y marginados y les muestran su cercanía.
Bienaventurados los “santos de la puerta de al lado”, reflejo de la presencia de Dios.
Bienaventurados los que se encuentran con Jesús y se dejan salvar por Él.
Bienaventurados los que “cantan la fe con alegría”, como os dijo San Agustín: “¡Cantad la fe!”.
A partir de 2026 todas las hermandades harán Estación de Penitencia frente al Santísimo y la Santa Cruz en la parroquia de Santo Domingo
El martes 28 de octubre tuvo lugar el cabildo extraordinario de la Agrupación general de hermandades y cofradías de Cabra en el que se votó el cambio de la Carrera Oficial. Treinta años llevaba vigente el actual modelo, pero en los últimos años habían surgido nuevas propuestas que hasta ahora no se había planteado de manera formal. El actual presidente de la Agrupación, Bernardo Nicolás Fresnillo, había incluido en su programa la modificación de la actual Carrera Oficial con el firme propósito de que hermandades realizarán “auténticas estaciones de penitencia” con oración y adoración al Santísimo o a la Santa Cruz, dependiendo del momento litúrgico de la Semana Santa. Esta nueva idea dará sentido litúrgico, apostólico y evangelizador a la piedad popular egabrense.
Analizadas todas las posibilidades, decidieron que el mejor enclave para la nueva Carrera Oficial es la capilla del Rosario de la parroquia de Santo Domingo de Guzmán. Será a partir de la Semana Santa de 2026 cuando las cofradías penitenciales hagan su estación de penitencia frente al Santísimo y la Santa Cruz, potenciando así el compromiso de fe católica que supone la manifestación cofrade en las calles de Cabra.
Francisco Delgado, consiliario de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Cabra y párroco de Santo Domingo de Guzmán, valora “muy positivamente la decisión tomada por las hermandades y cofradías de Cabra” de modificar la Carrera Oficial de los desfiles procesionales de nuestra Semana Santa. El hecho de que, al realizar su estación de penitencia, el lugar elegido sea la Capilla del Sagrario de Santo Domingo, nos permite a todos “garantizar ese encuentro profundo con el Señor, verdadero sentido de nuestras procesiones”. Tras esta “acertada y consensuada decisión de cambio”, el consiliario ha asegurado que se disponen ahora a trabajar unidos para que todo encaje de la mejor manera posible, en beneficio y mayor esplendor de la Semana Santa de Cabra. Este proyecto de cambio que las cofradías se han dado para el próximo año 2026, será “una ocasión preciosa de trabajar en comunión y fraternidad de todos los cofrades egabrenses”.
La Adoración Nocturna Española Femenina ha organizado, este fin de semana, el tercer encuentro de comienzo de curso pastoral. En esta ocasión ha sido en la ciudad de Baeza, a petición de la sección de esta ciudad, al cumplirse el centenario de la fundación de ANFE y haber sido Baeza la primera fundación en la Diócesis de Jaén.
Comenzó con un desayuno de bienvenida a las secciones de la Diócesis en el Nuevo Casino. Luego, las presidentas se reunieron en Asamblea general con la presidenta y consiliario Diocesano, Pilar León y D. Mariano Cabeza. Se hizo una revisión de la marcha de las secciones y se propusieron los actos que se van a desarrollar a la largo del año. El consiliario presentó las líneas generales del plan pastoral diocesano animando a las adoradoras a participar en los grupos sinodales que se van a constituir.
Mientras tanto, las adoradoras y acompañantes visitaron los monumentos de la ciudad Patrimonio de la Humanidad.
A las 11,30 de la mañana y bajo una leve lluvia, comenzó la procesión de banderas hasta la Iglesia de la Encarnación, sede la Cofradía del Santo Entierro. Allí se celebró la Santa Misa, presidida por el consiliario. En la homilía, D. Mariano reflexionó, a la luz de la Palabra de Dios del Domingo XXX del T.O., que la adoración y la vida espiritual nos tiene que llevar a la humildad y a la apertura del corazón a todos.
Terminada la sagrada comunión, se expuso el Santísimo Sacramento dejando un tiempo de oración personal. Después, se procesionó bajo palio a Jesús Sacramentado hasta la iglesia Parroquial de San Andrés, donde se impartió la bendición final.
D. Andrés Nájera, párroco de San Andrés, dirigió la salutación a la Santísima Virgen del Alcázar, Patrona de Baeza y se concluyó cantando la Salve e imponiendo unas cintas conmemorativas a las banderas de las secciones.
Todos los asistentes se volvieron a trasladar al Nuevo Casino para compartir una comida de hermandad que puso punto y final al día de convivencia.
En un mundo cada vez más secularizado la predicación de la vida eterna es un deporte de riesgo. En ocasiones conviene recurrir a ejemplos que nos ayuden a entender por qué la Iglesia sigue insistiendo en la consideración de realidades trascendentes que determinan la forma en la que vivimos y dan sentido a la existencia. En ocasiones también nos encontramos con obras de arte que nos ayudan a despertar la inquietud que, como decía el poeta, duerme en el fondo del alma.
Una de esas películas es, sin duda, El festín de Babette (1987), dirigida por Gabriel Axel y basada en el relato de Karen Blixen, se trata de una obra maestra que dialoga de manera profunda con la perspectiva bíblica del banquete. La llegada desde Francia de Babette a un gris poblado de la costa danesa trastoca la vida de sus moradores. Ellos, que viven bajo el yugo de la estricta moral luterana de un pastor difunto, rompen su austeridad gracias al regalo de agradecimiento de la refugiada: un banquete al modo francés.
Aquel detalle aparentemente mundano adquiere una dimensión espiritual. El banquete se convierte en un signo del Reino de Dios, de la plenitud vital y de la gracia que desborda. La imagen del banquete para hablar de la vida eterna no es extraña a la perspectiva cristiana. El profeta Isaías, las parábolas del Evangelio, todas las comidas en las que el Maestro participa con sus discípulos, las bodas del Cordero en el Apocalipsis y la misma Eucaristía nos hablan de la intimidad con Dios.
En la película, la mesa de Babette encarna la promesa del Evangelio: «Muchos vendrán del oriente y del occidente y se sentarán a la mesa en el Reino de los cielos» (Mt 8,11). La opulencia de los platos, la armonía de los sabores y la comunión que surge entre los comensales remiten a la parábola del gran banquete (Lc 14,15-24), donde la invitación de Dios se abre a todos, incluso a quienes el mundo considera indignos.
Desde esta perspectiva, los novísimos – muerte, juicio, infierno, purgatorio y gloria – que la Iglesia nos invita a meditar al llegar el mes de noviembre, se presentan como la consecuencia de haber aceptado o no la invitación a este banquete. La vida se lee como una preparación para estar con Dios. El juicio como una llamada a la responsabilidad. El infierno como el vacío de quienes viven sin esperanza. El purgatorio como lugar para la esperanza y el Cielo es la culminación del banquete donde la vida llega a plenitud, estar con Dios y con los demás, donde el vino fluye y la misericordia se sirve como el más delicado manjar.
En la Sagra-Huéscar lo han tenido en la ermita de San Eduardo, de Duda
En el día de ayer, miércoles 29 de octubre, tuvo lugar una jornada de retiro espiritual en los cinco arciprestazgos de la diócesis de Guadix. El arciprestazgo de la Sagra-Huéscar lo celebró en la ermita de San Eduardo, en el bello paraje de Duda donde el silencio es el mejor amigo que existe. Otros, lo han hecho en parroquias o en otros templos.
El encargado de dirigirlo en la Sagra-Huéscar ha sido el arcipreste José Antonio Martínez. La temática del retiro estuvo centrada en la vocación sacerdotal y, desde un primer momento, quiso motivar para que verdaderamente pudiese haber un encuentro personal con Dios.
Invitó a dejar por un momento las ocupaciones habituales de un sacerdote, a entrar por un instante dentro de uno mismo, a arrojar fuera las preocupaciones agobiantes, a apartar las inquietudes más acuciantes. Invitó a dedicar ese tiempo a Dios y a descansar un momento en su presencia, a entrar en el aposento del alma, a excluirlo todo, excepto Dios y aquello que pueda ayudar a buscarlo.
Este quiere ser el sentido de los retiros espirituales que cada mes viven los sacerdotes de la diócesis: dejar todo a un lado y pensar solamente en Aquel que da sentido y esperanza a nuestra vocación. De aquí la importancia de detenerse literalmente y poder tener un rato de oración.
Y, como es natural, a la experiencia espiritual hay que añadir la experiencia del encuentro con los hermanos sacerdotes, que se engrandece sobre todo en el momento de la comida fraterna, pues es cuando se puede charlar más distendidamente.
Marcelo fue un Centurión que, según parece, pertenecía a la Legio VII Gemina y el lugar de los hechos bien pudo ser la ciudad de León.
Su proceso tuvo lugar en dos pasos: primero en España, ante el presidente o gobernador Fortunato (28 de Julio del 298) y en Tánger el definitivo, ante Aurelio Agricolano (30 de Octubre del mismo año).
Fortunato envió a Agricolano el siguiente texto causa del juicio contra Marcelo: «Manilio Fortunato a Agricolano, su señor, salud. En el felicísimo día en que en todo el orbe celebramos solemnemente el cumpleaños de nuestros señores augustos césares, señor Aurelio Agricolano, Marcelo, centurión ordinario, como si se hubiese vuelto loco, se quitó espontáneamente el cinto militar y arrojó la espada y el bastón de centurión delante de las tropas de nuestros señores».
Ante Fortunato, Marcelo explica su actitud diciendo que era cristiano y no podía militar en más ejército que en el de Jesucristo, hijo de Dios omnipotente.
Fortunato, ante un hecho de tanta gravedad, creyó necesario notificarlo a los emperadores y césares y enviar a Marcelo para que lo juzgase su superior, el viceprefecto Agricolano. En Tánger, y ante Agricolano, se lee a Marcelo el acta de acusación, que él confirma y acepta, por lo que es condenado a la decapitación.
La leyenda -no necesariamente falsa- abunda en algunos detalles que, si bien no son necesarios para el esclarecimiento del hecho, sí lo explicita, o al menos lo sublima para estímulo de los cristianos. Así, se añade la puntualización de que se trataba de un acto oficial y solemne en que toda la tropa militar estaba dispuesta para ofrecer sacrificios a los dioses paganos e invocar su protección sobre el Emperador.