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La Hermandad de la Virgen de la Cabeza presenta el cartel y los actos del Centenario de la Coronación de la Patrona de Zújar

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La Hermandad de la Virgen de la Cabeza presenta el cartel y los actos del Centenario de la Coronación de la Patrona de Zújar

La Hermandad de la Virgen de la Cabeza, de Zújar, ha presentado el cartel conmemorativo del Centenario de la Coronación de la Virgen de la Cabeza, Patrona de la localidad, que se va a celebrar el 25 de abril de 2026. El acto ha tenido lugar el miércoles, 8 de octubre, en el Obispado de Guadix y ha contado con la presencia y la intervención del obispo accitano; el hermano mayor; el secretario de la Hermandad; y el párroco de Zújar. Además del cartel, se han anunciado algunos de los actos que se han programado para ese día grande y durante los seis meses que faltan para tan esperado acontecimiento.

Mons. Francisco Jesús Orozco, obispo de Guadix, ha agradecido que se haya hecho esta presentación en el Obispado, expresando así que la Hermandad quiere invitar a toda la diócesis y hacerla partícipe de todo lo que se está viviendo ya en Zújar con este acontecimiento. Además, ha recordado que la coronación canónica fue en 1926, a petición del párroco Antonio González, y que fue coronada por el entonces obispo de Guadix, Mons. Ángel Marquina y Corrales. Aquel fue un acto, dijo Mons. Orozco, “que va mucho más allá de poner una corona, porque era la expresión de amor de siglos y de todo un pueblo, que esta hermandad, ahora, en 2026, tiene la responsabilidad de seguir dilatando”.

También agradeció el obispo el esfuerzo con el que se está preparando todo, que comenzó hace ya unos meses y que incluye “todo un plan pastoral para el centenario, con catequesis, charlas culturales, encuentros festivos y litúrgicos, Eucaristías… muchísimos actos”. Incluso, reconoció el obispo que se ha hecho “la petición oficial de convertir la ermita de la Virgen de la Cabeza, en el cerro Jabalcón, en santuario diocesano”.

Tras el obispo, habló el hermano mayor de la Hermandad de la Virgen de la Cabeza, José Antonio Martínez, quien recordó algunos de los actos que se están organizando. Destaca, dijo, la Misa de Coronación del Centenario, que será el 25 de abril de 2026, en el mismo lugar donde se hizo la coronación hace 100 años. Estará presidida por el obispo, D. Francisco Jesús Orozco. También se va a ofrecer una corona de oro a la Virgen de la Cabeza, hecha con los donativos y las joyas de oro que los zujareños han entregado, y que recordará a la primera corona de la Virgen, que se perdió en la Guerra Civil. La corona la está haciendo el platero Manuel Casiano. Y, además, refirió que se ha hecho un cuadro-cartel conmemorativo de este gran acontecimiento para Zújar y para toda la diócesis.

El secretario de la Hermandad de la Virgen de la Cabeza, de Zújar, Hilario Montoya, fue el encargado de presentar el cartel, que es una pintura al óleo, hecha sobre una tabla montada en bastidor, realizada por el pintor sevillano José Cabrera Lazo de la Vega. Representa a la Virgen de la Cabeza, con el Niño, sobre el cerro Jabalcón y el pueblo de Zújar. Como dijo el secretario, “este cartel no es solo una obra pictórica, sino un testimonio de fe y memoria colectiva. Resume 100 años de devoción, historia y compromiso de un pueblo con su Virgen, proyectando a la vez la gran espiritualidad de la celebración que viviremos en 2026”.

También habló el párroco de Zújar, Valeriano Plaza, que anunció que además se va a realizar, como preparativo de este centenario, una Misión Popular, como la que hubo hace 100 años en Zújar. Será “una Misión Popular que va a recorrer todas las casas de la villa de Zújar, con la que se quiere fomentar el cariño a la Virgen, el rezo del Santo Rosario y, sobre todo, renovar la fe, una fe que en Zújar está muy presente, muy viva y late por la Virgen de la Cabeza, para que se viva de una manera un poco más concreta y que se revitalice”, dijo el párroco. E invitó a toda la diócesis a visitar Zújar y a rezar ante la Virgen de la Cabeza, pues la iglesia estará siempre abierta y se podrá subir al camarín.

Terminó la presentación de los actos de coronación el obispo, recogiendo esa invitación a toda la diócesis a participar el 25 de abril de 2026 en la Misa de Coronación y en la procesión que habrá ese día. Una invitación que la Hermandad de la Virgen de la Cabeza, de Zújar, ha querido hacer visible presentando estos actos en el corazón de la diócesis, en el Obispado.

Más información en la parroquia de Zújar: 672664655

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León XIV publica su primera exhortación apostólica

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El papa León XIV ha publicado su primera exhortación apostólica, «Dilexi Te», un trabajo iniciado por Francisco sobre el tema del servicio a los pobres, en cuyo rostro encontramos “el sufrimiento de los inocentes”. El Papa denuncia en ella la economía que mata, la falta de equidad, la violencia contra las mujeres, la desnutrición y la emergencia educativa.

Aquí puedes leer la Exhortación Apostólica completa

Y aquí consultar una infografía con los puntos principales de la exhortación

Dilexi te, «Te he amado» (Ap 3,9). El amor de Cristo que se hace carne en el amor a los pobres, entendido como cuidado de los enfermos; lucha contra la esclavitud; defensa de las mujeres que sufren exclusión y violencia; derecho a la educación; acompañamiento a los migrantes; limosna que “es justicia restaurada, no un gesto de paternalismo”; equidad, cuya falta es “raíz de los males sociales”.

León XIV firma su primera exhortación apostólica, Dilexi te, un texto de 121 puntos que brota del Evangelio del Hijo de Dios, que se hizo pobre desde su entrada en el mundo y que relanza el Magisterio de la Iglesia sobre los pobres en los últimos ciento cincuenta años. “Una auténtica fuente de enseñanzas”.

Siguiendo los pasos de sus predecesores

Con este documento firmado el 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís, el Pontífice agustino sigue los pasos de sus predecesores: Juan XXIII, con su llamamiento a los países ricos en Mater et Magistra para que no permanecieran indiferentes ante los países oprimidos por el hambre y la miseria (83); Pablo VI, con la Populorum progressio y su intervención en la ONU “como abogado de los pueblos pobres”; Juan Pablo II, que consolidó doctrinalmente “la relación preferencial de la Iglesia con los pobres”; Benedicto XVI y la Caritas in Veritate, con su lectura “que se hace más marcadamente política” de las crisis del tercer milenio. Por último, Francisco, que ha hecho del cuidado “por los pobres” y “con los pobres” uno de los pilares de su pontificado.

Una obra iniciada por Francisco y retomada por León

Fue precisamente Francisco quien, en los meses previos a su muerte, había comenzado a trabajar en la exhortación apostólica. Al igual que con la Lumen Fidei de Benedicto XVI, retomada en 2013 por Jorge Mario Bergoglio, también en esta ocasión es el sucesor quien completa la obra, que representa una continuación de la Dilexit nos, la última encíclica del Papa argentino sobre el Corazón de Jesús. Porque es fuerte el “vínculo” entre el amor de Dios y el amor a los pobres: a través de ellos, Dios “sigue teniendo algo que decirnos”, afirma el Papa León. Y recuerda el tema de la “opción preferencial” por los pobres, expresión nacida en América Latina (16) no para indicar “un exclusivismo o una discriminación hacia otros grupos”, sino “la acción de Dios que se compadece ante la pobreza y la debilidad de toda la humanidad”.

Los “rostros” de la pobreza

Son numerosos los motivos de reflexión y los impulsos a la acción en la exhortación de Robert Francis Prevost, en la que se analizan los “rostros” de la pobreza. La pobreza de “los que no tienen medios de sustento material”, “del que está marginado socialmente y no tiene instrumentos para dar voz a su dignidad y a sus capacidades”, la pobreza “moral”, “espiritual”, “cultural”; la pobreza “del que no tiene derechos, ni espacio, ni libertad” (9).

Nuevas formas de pobreza y falta de equidad

Ante este panorama, el Santo Padre considera “insuficiente” el compromiso para eliminar las causas estructurales de la pobreza en sociedades marcadas “por numerosas desigualdades”, por la aparición de nuevas formas de pobreza “más sutiles y peligrosas” (10), por normas económicas que han aumentado la riqueza, “pero sin equidad”.

La dictadura de una economía que mata

“Cuando dicen que el mundo moderno redujo la pobreza, lo hacen midiéndola con criterios de otras épocas no comparables con la realidad actual”, afirma León XIV (13). Desde este punto de vista, sostiene que “es encomiable el hecho de que las Naciones Unidas hayan puesto la erradicación de la pobreza como uno de los objetivos del Milenio”.

Sin embargo, el camino es largo, especialmente en una época en la que sigue vigente la “dictadura de una economía que mata”, en la que las ganancias de unos pocos “crecen exponencialmente”, mientras que las de la mayoría están “cada vez más lejos del bienestar de esa minoría feliz” y en la que se difunden “ideologías que defienden la autonomía absoluta de los mercados y la especulación financiera” (92).

Cultura del descarte, libertad de mercado, pastoral de las élites

Todo esto es señal de que aún persiste —“a veces bien enmascarada”— una cultura del descarte que “tolera con indiferencia que millones de personas mueran de hambre o sobrevivan en condiciones indignas del ser humano” (11). El Pontífice condena entonces los “criterios pseudocientíficos” según los cuales será “la libertad de mercado” la que llevará a la “solución” del problema de la pobreza, así como la “pastoral de las llamadas élites”, según la cual “en vez de perder el tiempo con los pobres, es mejor ocuparse de los ricos, de los poderosos y de los profesionales”.

Transformar la mentalidad

Lo que el Sucesor de Pedro preconiza es, por lo tanto, “un cambio de la mentalidad”, liberándose ante todo de la “ilusión de una felicidad que deriva de una vida acomodada”. Esto mueve a muchas personas a una visión de la existencia centrada en la riqueza y el éxito social “a toda costa”, incluso en detrimento de los demás y a través de “sistemas políticos y sociales injustos” (11).

En cada migrante rechazado está Cristo llamando a la puerta

León XIV dedica un amplio espacio al tema de las migraciones. Acompaña a sus palabras la imagen del pequeño Alan Kurdi, el niño sirio de 3 años que en 2015 se convirtió en símbolo de la crisis migratoria europea con la foto de su pequeño cuerpo sin vida en una playa. “Lamentablemente, aparte de alguna emoción momentánea, hechos similares se están volviendo cada vez más irrelevantes, reduciéndose a noticias marginales” (11), constata el Pontífice.

Al mismo tiempo, recuerda la labor plurisecular de la Iglesia hacia quienes se ven obligados a abandonar sus tierras, expresada en centros de acogida, misiones fronterizas, esfuerzos de Cáritas Internacional y otras instituciones (75).

“La Iglesia, como una madre, camina con quienes caminan. Donde el mundo ve una amenaza, ella ve hijos; donde se levantan muros, ella construye puentes. Sabe que el anuncio del Evangelio sólo es creíble cuando se traduce en gestos de cercanía y de acogida; y que en cada migrante rechazado, es Cristo mismo quien llama a las puertas de la comunidad” (75).

Siempre en el tema de la migración, Robert Prevost hace suyos los famosos “cuatro verbos” del Papa Francisco: “Acoger, proteger, promover e integrar”. Y también toma prestada del Papa argentino la definición de los pobres no solo como objeto de nuestra compasión, sino como “maestros del Evangelio”.

“Servir a los pobres no es un gesto de arriba hacia abajo, sino un encuentro entre iguales… Por lo tanto, cuando la Iglesia se inclina hasta el suelo para cuidar de los pobres, asume su postura más elevada” (79).

Las mujeres víctimas de violencia y exclusión

El Sucesor de Pedro se refiere luego a la actualidad, signada por miles de personas que mueren cada día “por causas vinculadas a la malnutrición” (12). “Doblemente pobres”, añade, son “las mujeres que sufren situaciones de exclusión, maltrato y violencia, porque frecuentemente se encuentran con menores posibilidades de defender sus derechos” (12).

“Los pobres no están por casualidad”

León XIV reflexiona profundamente sobre las causas mismas de la pobreza: “Los pobres no están por casualidad o por un ciego y amargo destino. Menos aún la pobreza, para la mayor parte de ellos, es una elección. Y sin embargo, todavía hay algunos que se atreven a afirmarlo, mostrando ceguera y crueldad”, subraya (14). “Obviamente entre los pobres hay también quien no quiere trabajar”, pero también hay muchos hombres y mujeres que recogen cartones desde la mañana hasta la noche solo para “sobrevivir” y nunca para “mejorar verdaderamente” su vida. En resumen, se lee en uno de los puntos centrales de Dilexi te, “no podemos decir que la mayor parte de los pobres lo son porque no hayan obtenido ‘méritos’, según esa falsa visión de la meritocracia en la que parecería que sólo tienen méritos aquellos que han tenido éxito en la vida” (14).

Ideologías y orientaciones políticas

A veces, observa el papa León, son los propios cristianos los que se dejan “contagiar por actitudes marcadas por ideologías mundanas o por posicionamientos políticos y económicos que llevan a injustas generalizaciones y a conclusiones engañosas”.

Hay quienes siguen diciendo: “Nuestra tarea es rezar y enseñar la verdadera doctrina”. “Pero, desvinculando este aspecto religioso de la promoción integral, agregan que sólo el gobierno debería encargarse de ellos, o que sería mejor dejarlos en la miseria, para que aprendan a trabajar” (114).

La limosna, a menudo despreciada

Un síntoma de esta mentalidad es el hecho de que el ejercicio de la caridad resulte a veces “despreciado o ridiculizado, como si se tratase de la fijación de algunos y no del núcleo incandescente de la misión eclesial” (15). León XIV se detiene largamente en la limosna, raramente practicada y a menudo despreciada (115).

“Como cristianos, no renunciamos a la limosna. Es un gesto que se puede hacer de diferentes formas, y que podemos intentar hacer de la manera más eficaz, pero es preciso hacerlo. Y siempre será mejor hacer algo que no hacer nada. En todo caso nos llegará al corazón. No será la solución a la pobreza mundial, que hay que buscar con inteligencia, tenacidad y compromiso social. Pero necesitamos practicar la limosna para tocar la carne sufriente de los pobres” (119).

Indiferencia por parte de los cristianos

En la misma línea, el Obispo de Roma se refiere a “la carencia o incluso la ausencia de compromiso” con la defensa y promoción de los más desfavorecidos en algunos movimientos o grupos cristianos (112). Si una comunidad eclesial no coopera en la inclusión de todos, advierte, “también correrá el riesgo de la disolución, aunque hable de temas sociales o critique a los gobiernos. Fácilmente terminará sumida en la mundanidad espiritual, disimulada con prácticas religiosas, con reuniones infecundas o con discursos vacíos” (113).

El derecho a la educación

El Pontífice recuerda además el ejemplo de San José de Calasanz, quien fundó la primera escuela popular gratuita de Europa (69), para subrayar la importancia de la educación de los pobres: “No es un favor, sino un deber”.

La lucha de los movimientos populares

En la exhortación, el Sucesor de Pedro también hace referencia a la lucha contra los “destructores efectos del imperio del dinero” por parte de los movimientos populares, dirigidos por líderes “muchas veces bajo sospecha o incluso perseguidos” (80). Estos, sostiene, “nos invitan a superar ‘esa idea de las políticas sociales concebidas como una política hacia los pobres pero nunca con los pobres, nunca de los pobres’” (81).

Una voz que despierte y denuncie

En las últimas páginas del documento, el Santo Padre hace un llamamiento a todo el Pueblo de Dios para que haga oír, “de diferentes maneras, una voz que despierte, que denuncie y que se exponga, aun a costo de parecer ‘estúpidos’”. “Las estructuras de injusticia deben ser reconocidas y destruidas con la fuerza del bien, a través de un cambio de mentalidad, pero también con la ayuda de las ciencias y de la técnica, mediante el desarrollo de políticas eficaces en la transformación de la sociedad” (97).

Los pobres, no un problema social, sino el centro de la Iglesia

Es necesario que “todos nos dejemos evangelizar por los pobres”, exhorta el Papa (102). “El cristiano no puede considerar a los pobres sólo como un problema social; estos son una ‘cuestión familiar’, son ‘de los nuestros’”. Por consiguiente, “nuestra relación con ellos no se puede reducir a una actividad o a una oficina de la Iglesia” (104).

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El clero y los laicos de Málaga se forman sobre el fenómeno de las sectas

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El 3 de noviembre, la Jornada de Formación Permanente del Clero y la Jornada de Formación de Laicos se centra en el desafío pastoral que suponen las sectas y la nueva religiosidad. La cita para el clero es a las 10.15 horas en la Casa Diocesana. Para los laicos, es a las 19.00 horas, en el Centro de Estudios Teológicos San Pablo.

Los sacerdotes y diáconos de la Diócesis de Málaga están llamados a formarse sobre el fenómeno de las sectas en la Jornada de Formación Permanente, que se celebra el 3 de noviembre, a las 10.15 horas, en Casa Diocesana. El ponente es Luis Santamaría del Río, teólogo, consultor de la Subcomisión para las Relaciones Interconfesionales de la Conferencia Episcopal Española, e investigador de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), autor de varios libros sobre el fenómeno de las sectas y los nuevos movimientos religiosos, el último «A las afueras de la cruz. Las sectas de origen cristiano en España».

El programa de la Jornada de Formación Permanente del Clero convocada por la Delegación para el Clero comprende:

10.15 horas: Acogida

10.30 horas: Rezo de Hora Intermedia

10.45 horas: 1ª charla y diálogo

12.00 horas: Descanso

12.30 horas: 2ª charla y diálogo

Se terminará sobre las 13.30 horas. En la convocatoria avisan de que quienes se queden a comer, deben anunciarlo a través de su arcipreste o en el Obispado, a Alejandro Luque, quienen no estén integrados pastoralmente en los arciprestazgos.

JORNADA DE FORMACIÓN DE LAICOS

Los laicos tienen oportunidad de formarse sobre este mismo tema también el día 3 de noviembre, pero por la tarde, a las 19.00 horas, en el Centro de Estudios Teológicos San Pablo (Calle Abadía de Santa Ana, 4, 2ª planta). Esta convocatoria de la Vicaría para el Laicado está abierta libremente a todas las personas interesadas.

Las sectas, en palabras del ponente, Luis Santamaría, «existen, que aún hay gente que lo duda. Existen y actúan. Sacerdotes y laicos tenemos que estar prevenidos ante las sectas que se acercan a nosotros. Están por todos lados y es fácil que accedan a nosotros en cualquier ámbito. Por tanto, tenemos que estar prevenidos, pero sobre todo para ayudar a otros, para estar atentos a las señales de alarma que se pueden dar en personas cercanas, de nuestras familias, de nuestras comunidades… Especialmente, sacerdotes y agentes de pastoral, este tema es importante por las personas que están a su cargo, a las que cuidan y a las que sirven, para detectarlo y poder ayudar a no caer cuando una persona está en proceso de captación, para ayudar también a sostener a las familias que están sufriendo el drama de la captación de un ser querido, y para, también, ayudar, y estar disponibles para las personas que abandonan las sectas y se encuentran de repente solas en el mundo, con el lastre de un trauma por lo que han vivido dentro de la secta y la necesidad de reconstruir su vida casi desde cero».

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Clero y laicos se forman sobre el fenómeno de las sectas

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El 3 de noviembre, la Jornada de Formación Permanente del Clero y la Jornada de Formación de Laicos se centra en el desafío pastoral que suponen las sectas y la nueva religiosidad. La cita para el clero es a las 10.15 horas en la Casa Diocesana. Para los laicos, es a las 19.00 horas, en el Centro de Estudios Teológicos San Pablo.

Los sacerdotes y diáconos de la Diócesis de Málaga están llamados a formarse sobre el fenómeno de las sectas en la Jornada de Formación Permanente, que se celebra el 3 de noviembre, a las 10.15 horas, en Casa Diocesana. El ponente es Luis Santamaría del Río, teólogo, consultor de la Subcomisión para las Relaciones Interconfesionales de la Conferencia Episcopal Española, e investigador de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), autor de varios libros sobre el fenómeno de las sectas y los nuevos movimientos religiosos, el último «A las afueras de la cruz. Las sectas de origen cristiano en España».

El programa de la Jornada de Formación Permanente del Clero convocada por la Delegación para el Clero comprende:

10.15 horas: Acogida

10.30 horas: Rezo de Hora Intermedia

10.45 horas: 1ª charla y diálogo

12.00 horas: Descanso

12.30 horas: 2ª charla y diálogo

Se terminará sobre las 13.30 horas. En la convocatoria avisan de que quienes se queden a comer, deben anunciarlo a través de su arcipreste o en el Obispado, a Alejandro Luque, quienen no estén integrados pastoralmente en los arciprestazgos.

JORNADA DE FORMACIÓN DE LAICOS

Los laicos tienen oportunidad de formarse sobre este mismo tema también el día 3 de noviembre, pero por la tarde, a las 19.00 horas, en el Centro de Estudios Teológicos San Pablo (Calle Abadía de Santa Ana, 4, 2ª planta). Esta convocatoria de la Vicaría para el Laicado está abierta libremente a todas las personas interesadas.

Las sectas, en palabras del ponente, Luis Santamaría, «existen, que aún hay gente que lo duda. Existen y actúan. Sacerdotes y laicos tenemos que estar prevenidos ante las sectas que se acercan a nosotros. Están por todos lados y es fácil que accedan a nosotros en cualquier ámbito. Por tanto, tenemos que estar prevenidos, pero sobre todo para ayudar a otros, para estar atentos a las señales de alarma que se pueden dar en personas cercanas, de nuestras familias, de nuestras comunidades… Especialmente, sacerdotes y agentes de pastoral, este tema es importante por las personas que están a su cargo, a las que cuidan y a las que sirven, para detectarlo y poder ayudar a no caer cuando una persona está en proceso de captación, para ayudar también a sostener a las familias que están sufriendo el drama de la captación de un ser querido, y para, también, ayudar, y estar disponibles para las personas que abandonan las sectas y se encuentran de repente solas en el mundo, con el lastre de un trauma por lo que han vivido dentro de la secta y la necesidad de reconstruir su vida casi desde cero».

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Luis Santamaría: «Las sectas esconden el sometimiento tras un escaparate de luz y liberación»

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Luis Santamaría del Río, consultor de la Subcomisión de Relaciones Interconfesionales de la Conferencia Episcopal Española e investigador de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), es el encargado de la formación de clero y laicos el día 3 de noviembre, y de inaugurar el curso sobre «Sectas y nuevos movimientos religiosos» que ofrece el Centro Superior de Estudios Teológicos San Pablo de Málaga.

¿Quién calma hoy la sed de trascendencia de la persona?
La secularización no ha traído consigo una desaparición del fenómeno religioso, sino una multiplicación de ofertas de sentido entre las que están también formas patológicas, como puede ser el fundamentalismo religioso, el crecimiento de la magia y la superstición o las sectas, que es el tema de este curso. Las religiones tradicionales, y en parte también la Iglesia católica, han fallado a la hora de acercarse a cada persona y afrontar sus preguntas vitales, sus necesidades y sus heridas. Y el fenómeno sectario ha sido muy hábil a la hora de identificar necesidades, aspiraciones, deseos, heridas y ofrecer algo que parece mucho más fácil, un atajo, para las respuestas a las preguntas vitales o la aparente solución para los problemas personales.

¿También se fundamentaliza lo religioso?
Sí, estamos en momentos de crisis social, de crisis cultural a gran escala, que hacen que las formas patológicas de religiosidad crezcan. En lugar de lo ordinario, lo normal, lo que verdaderamente construye, libera y aporta a las personas. Dentro de las comunidades religiosas, también dentro de la Iglesia católica, pueden darse actitudes fundamentalistas y comportamientos sectarios.

En este fenómeno de los nuevos movimientos, ¿qué hay de peligroso?
El peligro que está en el fenómeno sectario es que tras un escaparate atractivo, de luz, liberación y compasión, se esconde una trastienda de manipulación. Las sectas son un fenómeno de sometimiento. Aprovechan terminología espiritual o ahora, sobre todo, más del crecimiento personal y de la meditación, para acabar sometiendo a las personas a un grupo y a un líder. Sorprendentemente, cuanta más aspiración y posibilidad de libertad creemos que tenemos, somos conducidos de una forma muy sutil a través de los mecanismos de la persuasión coercitiva a una verdadera esclavitud.

¿Cómo es que el ser humano, hoy tan aparentemente “empoderado” para tantas cosas, caiga en lo espiritual en este tipo de trampas?
Es que en el mundo de las sectas se da un espejismo, en el que uno cree que toma las riendas de su propia vida a todos los niveles, escoge el camino que quiere seguir, rompe con tradiciones, con cosas aprendidas, con herencias recibidas, pero, tras todo ese lenguaje utilizado por los gurús espirituales de hoy, se esconde la trampa de pasar a una dependencia total de sus palabras, de sus ideas y de sus normas. Cada vez hay más gente que, sin pertenecer estrictamente a un grupo sectario, las consecuencias del seguimiento a un gurú, a un maestro espiritual o de la práctica de una técnica concreta, ya sea de meditación, superación, o incluso de respiración o gimnástica, le está llevando a ser seguidor de alguien, cuando su propósito no era ese, sino mejorar algún aspecto de su vida, aprender algo, realizar un cursillo. Al final, aparece en otra cosmovisión, en otra forma de pensar, de sentir y de vivir, y no se ha dado cuenta. Quienes sí se han dado cuenta son sus familiares, sus amigos, que se sorprenden al ver que esa persona, sin necesidad de pertenecer a un grupo o acudir a un lugar, como pasaba con las sectas toda la vida, ha cambiado del todo, se ha distanciado de ellos y es una persona distinta.

¿Cuál es la realidad de las sectas en España?
En primer lugar hay que recordar que es, efectivamente, una realidad, porque hay gente que dice que no existe este fenómeno. En segundo lugar, que es una realidad en crecimiento, es decir, nuestra sociedad se seculariza progresivamente y, sin embargo, las sectas no solo crecen, se estancan o desaparecen, sino que crecen. Se calcula que en torno a un 1% de la población española está en sectas. Estamos hablando de una cantidad incontable de grupos. En uno de mis últimos libros realizo un análisis solo de las sectas de origen cristiano presentes en España y eran un centenar. Dos años después de la publicación del libro, he descubierto algunas más. Y en el ámbito de la Nueva Era, de la New Age, es imposible monitorizar todos los grupos, grandes y sobre todo pequeños, que se mueven ahí. Se trata, por tanto, de un problema extenso en nuestra sociedad e intenso para las familias que lo sufren.

¿Y en nuestras propias comunidades, también se cuela?
Sí, desde luego, a veces por ignorancia, por apertura ingenua, y a veces también por necesidad de sostenimiento de nuestros espacios, sobre todo en casas de espiritualidad en las que a veces se abren las puertas a cosas de apariencia espiritual positiva, pero que si rascamos un poco, encontramos que se trata de cuestiones incompatibles con la fe cristiana, tanto en su cosmovisión como en su forma de tratar al ser humano. Y, en segundo lugar, a veces directamente hay sectas que están aprovechándose de esa ingenuidad o de esa necesidad de ocupar espacios para ofrecer lugares bonitos, que invitan a la paz interior y al recogimiento y además, de algún modo están lavando su imagen porque la mayor parte de la gente no va a sospechar de un grupo espiritual que  se reúna en un espacio católico. Ahí tenemos que ser muy cautos, audaces y astutos  para no ser cómplices del mal. A estas alturas de la vida, ya he conocido a bastantes personas que entraron en una secta, que fueron captadas, por una actividad desarrollada en un espacio eclesial.

¿Y qué señales de alarma podemos percibir?
Tenemos que pararnos y dedicar tiempo para ir más allá de las apariencias. Porque siempre el cartel va ser muy bonito, las palabras de introducción y de publicidad van a ser maravillosas, pero tenemos que pararnos a leer, saber de qué grupo se trata, quién es su fundador o su líder, cuáles son sus principios teóricos y sus actividades prácticas. Ver ahí con qué lenguaje estamos siendo llamados. Porque se nos habla de estos temas pero colando términos que hacen referencia a un poder interior, divino, que habita en nosotros.  Al final la Nueva Era siempre, aunque intente tener apariencia de cristianismo en muchos de sus términos, si rascamos un poco vemos que esas palabras tienen un sentido distinto. Hay que pararse y, desde una buena formación cristiana, ver lo que pueda haber que no sea compatible con la fe cristiana, analizar también el ofrecimiento o la oferta de soluciones mágicas, de sanación, con mensajes que hablan muy poco de Dios y mucho de nosotros mismos divinizados.

¿Por qué es importante que tantos sacerdotes como laicos conozcan este tema? 
Tenemos que estar prevenidos ante las sectas que se acercan a nosotros. Están por todos lados y es fácil que accedan a nosotros en cualquier ámbito. Por eso tenemos que estar prevenidos, pero sobre todo para ayudar a otros, para estar atentos a las señales de alarma que se pueden dar en personas cercanas, de nuestra familia, de nuestras comunidades. Especialmente sacerdotes y agentes de pastoral, que sepan ver en las personas que están a su cargo, a las que cuidan y a las que sirven, las señales de alarma para poder ayudar a no caer cuando una persona está en proceso de captación, para ayudar también a sostener a las familias que están sufriendo el drama de la captación de un ser querido, y para también ayudar, estar disponibles, para las personas que abandonan las sectas y se encuentran de repente solas en el mundo con el lastre de un trauma por lo que han vivido dentro de la secta y la necesidad de reconstruir su vida casi desde cero.

¿El fin último de una secta es el sometimiento de la persona?
El sometimiento de la persona es el último, pero muy cercanos, como fines penúltimos o medios necesarios, está el control económico, el aprovecharse económicamente de las personas, el nutrirse también de su trabajo, de su trabajo voluntario y gratuito, por supuesto, esclavo, y, en ocasiones, el abuso sexual, porque el control de la sexualidad de una persona es el control y la dominación de su rincón más íntimo. Pero en el fondo está el sometimiento, porque en las sectas, al menos cuando se fundan, el líder está convencido de ser alguien especial, suele tener características narcisistas y paranoides de la personalidad, y se impone como alguien superior, y necesita personas que retroalimenten ese ego expandido y lleven a cabo sus delirios mesiánicos.

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Convocatoria de nuevas voces del Coro Diocesano de Málaga

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La Delegación Diocesana de Liturgia, con el objetivo de impulsar el servicio que realiza el Coro Diocesano de Málaga, ha abierto el plazo de inscripción para nuevas audiciones hasta el 15 de diciembre.

Desde la delegación aclaran que la participación en el coro diocesano, que ha intervenido desde 2018 en numerosas celebraciones litúrgicas, en conciertos-oración y en otro tipo de celebraciones, no implica abandonar los coros de procedencia. «Aunque no se exigen conocimientos musicales reglados –afirma el delegado, Alejandro Pérez Verdugo, en su carta de convocatoria–, se valorará la afinación, estado de la voz, capacidad musical, disponibilidad…».

La inscripción hay que hacerla, antes del 15 de diciembre, enviando un WhatsApp al: 678 530 076 diciendo su nombre y procedencia y manifestando su deseo de formar parte del coro diocesano.

Los inscritos recibirán posteriormente los días y las horas de las audiciones. Los ensayos se realizan en la Iglesia de San Felipe Neri (Calle Cabello, 20; de Málaga) los martes por la tarde.

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León XIV publica su primera exhortación apostólica sobre el amor hacia los pobres

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El papa León XIV ha publicado su primera exhortación apostólica, «Dilexi Te», un trabajo iniciado por Francisco sobre el tema del servicio a los pobres, en cuyo rostro encontramos “el sufrimiento de los inocentes”. El Papa denuncia en ella la economía que mata, la falta de equidad, la violencia contra las mujeres, la desnutrición y la emergencia educativa.

Aquí puedes leer la Exhortación completa

Y aquí consultar una infografía con los puntos principales de la exhortación

Dilexi te, «Te he amado» (Ap 3,9). El amor de Cristo que se hace carne en el amor a los pobres, entendido como cuidado de los enfermos; lucha contra la esclavitud; defensa de las mujeres que sufren exclusión y violencia; derecho a la educación; acompañamiento a los migrantes; limosna que “es justicia restaurada, no un gesto de paternalismo”; equidad, cuya falta es “raíz de los males sociales”.

León XIV firma su primera exhortación apostólica, Dilexi te, un texto de 121 puntos que brota del Evangelio del Hijo de Dios, que se hizo pobre desde su entrada en el mundo y que relanza el Magisterio de la Iglesia sobre los pobres en los últimos ciento cincuenta años. “Una auténtica fuente de enseñanzas”.

Siguiendo los pasos de sus predecesores

Con este documento firmado el 4 de octubre, festividad de San Francisco de Asís, el Pontífice agustino sigue los pasos de sus predecesores: Juan XXIII, con su llamamiento a los países ricos en Mater et Magistra para que no permanecieran indiferentes ante los países oprimidos por el hambre y la miseria (83); Pablo VI, con la Populorum progressio y su intervención en la ONU “como abogado de los pueblos pobres”; Juan Pablo II, que consolidó doctrinalmente “la relación preferencial de la Iglesia con los pobres”; Benedicto XVI y la Caritas in Veritate, con su lectura “que se hace más marcadamente política” de las crisis del tercer milenio. Por último, Francisco, que ha hecho del cuidado “por los pobres” y “con los pobres” uno de los pilares de su pontificado.

Una obra iniciada por Francisco y retomada por León

Fue precisamente Francisco quien, en los meses previos a su muerte, había comenzado a trabajar en la exhortación apostólica. Al igual que con la Lumen Fidei de Benedicto XVI, retomada en 2013 por Jorge Mario Bergoglio, también en esta ocasión es el sucesor quien completa la obra, que representa una continuación de la Dilexit nos, la última encíclica del Papa argentino sobre el Corazón de Jesús. Porque es fuerte el “vínculo” entre el amor de Dios y el amor a los pobres: a través de ellos, Dios “sigue teniendo algo que decirnos”, afirma el Papa León. Y recuerda el tema de la “opción preferencial” por los pobres, expresión nacida en América Latina (16) no para indicar “un exclusivismo o una discriminación hacia otros grupos”, sino “la acción de Dios que se compadece ante la pobreza y la debilidad de toda la humanidad”.

Los “rostros” de la pobreza

Son numerosos los motivos de reflexión y los impulsos a la acción en la exhortación de Robert Francis Prevost, en la que se analizan los “rostros” de la pobreza. La pobreza de “los que no tienen medios de sustento material”, “del que está marginado socialmente y no tiene instrumentos para dar voz a su dignidad y a sus capacidades”, la pobreza “moral”, “espiritual”, “cultural”; la pobreza “del que no tiene derechos, ni espacio, ni libertad” (9).

Nuevas formas de pobreza y falta de equidad

Ante este panorama, el Santo Padre considera “insuficiente” el compromiso para eliminar las causas estructurales de la pobreza en sociedades marcadas “por numerosas desigualdades”, por la aparición de nuevas formas de pobreza “más sutiles y peligrosas” (10), por normas económicas que han aumentado la riqueza, “pero sin equidad”.

La dictadura de una economía que mata

“Cuando dicen que el mundo moderno redujo la pobreza, lo hacen midiéndola con criterios de otras épocas no comparables con la realidad actual”, afirma León XIV (13). Desde este punto de vista, sostiene que “es encomiable el hecho de que las Naciones Unidas hayan puesto la erradicación de la pobreza como uno de los objetivos del Milenio”.

Sin embargo, el camino es largo, especialmente en una época en la que sigue vigente la “dictadura de una economía que mata”, en la que las ganancias de unos pocos “crecen exponencialmente”, mientras que las de la mayoría están “cada vez más lejos del bienestar de esa minoría feliz” y en la que se difunden “ideologías que defienden la autonomía absoluta de los mercados y la especulación financiera” (92).

Cultura del descarte, libertad de mercado, pastoral de las élites

Todo esto es señal de que aún persiste —“a veces bien enmascarada”— una cultura del descarte que “tolera con indiferencia que millones de personas mueran de hambre o sobrevivan en condiciones indignas del ser humano” (11). El Pontífice condena entonces los “criterios pseudocientíficos” según los cuales será “la libertad de mercado” la que llevará a la “solución” del problema de la pobreza, así como la “pastoral de las llamadas élites”, según la cual “en vez de perder el tiempo con los pobres, es mejor ocuparse de los ricos, de los poderosos y de los profesionales”.

Transformar la mentalidad

Lo que el Sucesor de Pedro preconiza es, por lo tanto, “un cambio de la mentalidad”, liberándose ante todo de la “ilusión de una felicidad que deriva de una vida acomodada”. Esto mueve a muchas personas a una visión de la existencia centrada en la riqueza y el éxito social “a toda costa”, incluso en detrimento de los demás y a través de “sistemas políticos y sociales injustos” (11).

En cada migrante rechazado está Cristo llamando a la puerta

León XIV dedica un amplio espacio al tema de las migraciones. Acompaña a sus palabras la imagen del pequeño Alan Kurdi, el niño sirio de 3 años que en 2015 se convirtió en símbolo de la crisis migratoria europea con la foto de su pequeño cuerpo sin vida en una playa. “Lamentablemente, aparte de alguna emoción momentánea, hechos similares se están volviendo cada vez más irrelevantes, reduciéndose a noticias marginales” (11), constata el Pontífice.

Al mismo tiempo, recuerda la labor plurisecular de la Iglesia hacia quienes se ven obligados a abandonar sus tierras, expresada en centros de acogida, misiones fronterizas, esfuerzos de Cáritas Internacional y otras instituciones (75).

“La Iglesia, como una madre, camina con quienes caminan. Donde el mundo ve una amenaza, ella ve hijos; donde se levantan muros, ella construye puentes. Sabe que el anuncio del Evangelio sólo es creíble cuando se traduce en gestos de cercanía y de acogida; y que en cada migrante rechazado, es Cristo mismo quien llama a las puertas de la comunidad” (75).

Siempre en el tema de la migración, Robert Prevost hace suyos los famosos “cuatro verbos” del Papa Francisco: “Acoger, proteger, promover e integrar”. Y también toma prestada del Papa argentino la definición de los pobres no solo como objeto de nuestra compasión, sino como “maestros del Evangelio”.

“Servir a los pobres no es un gesto de arriba hacia abajo, sino un encuentro entre iguales… Por lo tanto, cuando la Iglesia se inclina hasta el suelo para cuidar de los pobres, asume su postura más elevada” (79).

Las mujeres víctimas de violencia y exclusión

El Sucesor de Pedro se refiere luego a la actualidad, signada por miles de personas que mueren cada día “por causas vinculadas a la malnutrición” (12). “Doblemente pobres”, añade, son “las mujeres que sufren situaciones de exclusión, maltrato y violencia, porque frecuentemente se encuentran con menores posibilidades de defender sus derechos” (12).

“Los pobres no están por casualidad”

León XIV reflexiona profundamente sobre las causas mismas de la pobreza: “Los pobres no están por casualidad o por un ciego y amargo destino. Menos aún la pobreza, para la mayor parte de ellos, es una elección. Y sin embargo, todavía hay algunos que se atreven a afirmarlo, mostrando ceguera y crueldad”, subraya (14). “Obviamente entre los pobres hay también quien no quiere trabajar”, pero también hay muchos hombres y mujeres que recogen cartones desde la mañana hasta la noche solo para “sobrevivir” y nunca para “mejorar verdaderamente” su vida. En resumen, se lee en uno de los puntos centrales de Dilexi te, “no podemos decir que la mayor parte de los pobres lo son porque no hayan obtenido ‘méritos’, según esa falsa visión de la meritocracia en la que parecería que sólo tienen méritos aquellos que han tenido éxito en la vida” (14).

Ideologías y orientaciones políticas

A veces, observa el papa León, son los propios cristianos los que se dejan “contagiar por actitudes marcadas por ideologías mundanas o por posicionamientos políticos y económicos que llevan a injustas generalizaciones y a conclusiones engañosas”.

Hay quienes siguen diciendo: “Nuestra tarea es rezar y enseñar la verdadera doctrina”. “Pero, desvinculando este aspecto religioso de la promoción integral, agregan que sólo el gobierno debería encargarse de ellos, o que sería mejor dejarlos en la miseria, para que aprendan a trabajar” (114).

La limosna, a menudo despreciada

Un síntoma de esta mentalidad es el hecho de que el ejercicio de la caridad resulte a veces “despreciado o ridiculizado, como si se tratase de la fijación de algunos y no del núcleo incandescente de la misión eclesial” (15). León XIV se detiene largamente en la limosna, raramente practicada y a menudo despreciada (115).

“Como cristianos, no renunciamos a la limosna. Es un gesto que se puede hacer de diferentes formas, y que podemos intentar hacer de la manera más eficaz, pero es preciso hacerlo. Y siempre será mejor hacer algo que no hacer nada. En todo caso nos llegará al corazón. No será la solución a la pobreza mundial, que hay que buscar con inteligencia, tenacidad y compromiso social. Pero necesitamos practicar la limosna para tocar la carne sufriente de los pobres” (119).

Indiferencia por parte de los cristianos

En la misma línea, el Obispo de Roma se refiere a “la carencia o incluso la ausencia de compromiso” con la defensa y promoción de los más desfavorecidos en algunos movimientos o grupos cristianos (112). Si una comunidad eclesial no coopera en la inclusión de todos, advierte, “también correrá el riesgo de la disolución, aunque hable de temas sociales o critique a los gobiernos. Fácilmente terminará sumida en la mundanidad espiritual, disimulada con prácticas religiosas, con reuniones infecundas o con discursos vacíos” (113).

El derecho a la educación

El Pontífice recuerda además el ejemplo de San José de Calasanz, quien fundó la primera escuela popular gratuita de Europa (69), para subrayar la importancia de la educación de los pobres: “No es un favor, sino un deber”.

La lucha de los movimientos populares

En la exhortación, el Sucesor de Pedro también hace referencia a la lucha contra los “destructores efectos del imperio del dinero” por parte de los movimientos populares, dirigidos por líderes “muchas veces bajo sospecha o incluso perseguidos” (80). Estos, sostiene, “nos invitan a superar ‘esa idea de las políticas sociales concebidas como una política hacia los pobres pero nunca con los pobres, nunca de los pobres’” (81).

Una voz que despierte y denuncie

En las últimas páginas del documento, el Santo Padre hace un llamamiento a todo el Pueblo de Dios para que haga oír, “de diferentes maneras, una voz que despierte, que denuncie y que se exponga, aun a costo de parecer ‘estúpidos’”.

“Las estructuras de injusticia deben ser reconocidas y destruidas con la fuerza del bien, a través de un cambio de mentalidad, pero también con la ayuda de las ciencias y de la técnica, mediante el desarrollo de políticas eficaces en la transformación de la sociedad” (97).

Los pobres, no un problema social, sino el centro de la Iglesia

Es necesario que “todos nos dejemos evangelizar por los pobres”, exhorta el Papa (102). “El cristiano no puede considerar a los pobres sólo como un problema social; estos son una ‘cuestión familiar’, son ‘de los nuestros’”. Por consiguiente, “nuestra relación con ellos no se puede reducir a una actividad o a una oficina de la Iglesia” (104).

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La Iglesia de Málaga celebra el Domingo de la Catequesis

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Tras la celebración del Jubileo de los Catequistas, en el que han participado catequistas de distintas parroquias de Málaga, acompañados de miembros de la Delegación diocesana de Catequesis, llega el Domingo de la Catequesis, el 19 de octubre. En este día, se invita a las parroquias y comunidades locales a realizar el envío de las personas designadas a esta importante misión, si no lo hayan realizado aún.

Aquí tienes el Rito de Envío para Catequistas.

En la carta dirigida a las comunidades, el delegado de Catequesis, Gonzalo Martín, comparte algunas de las ideas más significativas recibidas en el Jubileo, para unirlas al sentido que se celebra el domingo de la Catequesis.

El lema es intuir la esperanza, sembrar la fe. El delegado busca, en esta invitación, «compartir algunas de las ideas más significativas de sus intervenciones —en la audiencia del 27 de septiembre y en la homilía del 28— y para enlazarlas con las cuatro palabras que nuestro Obispo nos regaló en el Jubileo Diocesano de los Catequistas: Llamados, Conducidos, Transfigurados y Bendecidos. Ambos mensajes se iluminan mutuamente y trazan un mismo camino de discipulado y servicio: 

1. Llamados a intuir la voz de Dios.
El Papa nos invitó a “intuir”, a tener ese olfato espiritual de los pequeños que perciben la presencia de Dios en lo cotidiano. Solo quien se sabe llamado puede abrir el corazón con sencillez, sin pretender dominar la fe, sino acogerla como don. Somos catequistas porque el Señor nos ha mirado y nos ha elegido para ser testigos de su amor. Esa llamada no nace de nuestra capacidad, sino del deseo de Dios de hacerse cercano a través de nosotros.

2. Conducidos por la mirada de Cristo.
A la luz del Evangelio del rico y Lázaro (Lc 16,19-31), el Papa nos recordó la mirada de Jesús, que no se detiene en las apariencias, sino que ve el corazón. Esa mirada nos conduce a salir de la indiferencia y mirar al otro con compasión. El catequista, guiado por el Espíritu, se deja conducir para acercar a todos al amor de Dios; no enseña desde la altura, sino desde la cercanía y la escucha.

3. Transfigurados mientras caminamos.
El Papa nos recordó que “intuir es una forma de esperar” y que debemos “hacernos pequeños según el Evangelio para servir los sueños de Dios”. Como Ambrosio, que se dejó transformar cuando fue llamado, también nosotros estamos llamados a dejarnos transfigurar por el camino, a cambiar mientras servimos. En el contacto con los catecúmenos, los niños, los jóvenes o los adultos, el Espíritu obra también en nosotros, y nuestro rostro se va iluminando con la alegría del Evangelio.

4. Bendecidos para bendecir.
El Obispo nos recordó que somos bendecidos, enviados a ser bendición para los demás. El Papa insistía en que el mundo necesita testigos que no enseñen solo con palabras, sino con la vida. Esa es la bendición que brota de un corazón que se deja tocar y convertir por Dios. Cada gesto de servicio, cada hora entregada a la catequesis, cada encuentro con quienes buscan al Señor, es ya una semilla de bendición que fecunda nuestra Iglesia diocesana.

El delegado concluye con esta invitación: «Queridos sacerdotes y catequistas, en este Domingo de la Catequesis, dentro de la celebración del Año Jubilar, deseo que sea para todos un tiempo de renovación interior. El Señor nos llama, nos conduce, nos transfigura y nos bendice para que sigamos sirviendo con alegría. Hagamos de nuestras catequesis espacios donde los pequeños “intuyan” la presencia viva de Jesús y donde cada palabra y gesto anuncien la esperanza del Evangelio».

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Un curso del CESET aborda las sectas y los nuevos movimientos religiosos

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Del 3 al 7 de noviembre se celebra en el CESET San Pablo un curso titulado «Sectas y nuevos movimientos religiosos. Un desafío pastoral». Puede cursarse en modo presencial, en la sede del centro, y online. Los ponentes son el experto en sectas Luis Santamaría, el profesor de Nuevos Movimientos Religiosos del CESET Ángel Nuño y el también especialista en sectas Manuel Sánchez Gómez.

Las conferencias dan comienzo a las 19.00 horas, en el salón de actos del CESET San Pablo, en calle Abadía de Santa Ana, 4, 2ª planta. Málaga.
El precio de inscripción es de 35 euros (con un precio reducido para alumnos de los centros teológicos en el curso 25-26).

Programa:

Lunes 3 de noviembre: El fenómeno sectario en general, por Luis Santamaría del Río, teólogo, profesor, consultor de la Subcomisión de Relaciones Interconfesionales de la Conferencia Episcopal Española e investigador de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES).

Martes 4 de noviembre: New Age y esoterismo, por Ángel Nuño, profesor de Nuevos Movimientos Religiosos en el CESET San Pablo.

Miércoles 5 de noviembre: El desafío pastoral, por Manuel Sánchez Gómez, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), sacerdote diocesano de Córdoba y profesor del Instituto de Estudios Teológicos «San Pelagio».

Para inscribirse, puede rellenarse el formulario a partir del martes 14 de octubre, en ceset.edu.es

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Ha fallecido D. José Antonio Alarcos Castillo, padre del sacerdote Francisco José Alarcos

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Ha fallecido D. José Antonio Alarcos Castillo, padre del sacerdote Francisco José Alarcos

 

En la tarde del miércoles 8 de octubre, en Cúllar, ha fallecido D. José Antonio Alarcos Castillo, a la edad de 87 años, padre del sacerdote Francisco José Alarcos Martínez. Las exequias serán el jueves 9 de octubre, a las 12 de la mañana, en la iglesia parroquial de Cúllar. El cuerpo está siendo velado en el Tanatorio del Pardo, de la localidad de Cúllar.

D. José Antonio estaba casado y era padre de dos hijos, uno de ellos el sacerdote de la diócesis de Guadix Francisco José Alarcos, que, en la actualidad, es profesor en la Universidad Loyola de Andalucía y director de la Cátedra Andaluza de Bioética.

Las exequias se celebrarán en la iglesia parroquial de Cúllar, a las 12 de la mañana. Estarán presididas por el obispo de Guadix, D. Francisco Jesús Orozco y serán concelebradas por sacerdotes de la diócesis.

Descanse en paz D. José Antonio Alarcos Castillo, padre del sacerdote Francisco José Alarcos

 

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