El próximo 28 de diciembre, Día de Andalucía, la localidad de Tolox impondrá la medalla conmemorativa como hijo adoptivo de la localidad al sacerdote malagueño José Luis Bellón, que ejerció allí como párroco desde 2015 a 2023.
La ceremonia tendrá lugar a las 12.00 horas en la Plaza Alta de Tolox con la presencia de toda la corporación municipal y el resto de autoridades del pueblo.
Para Juan Moreno, teniente alcalde de la localidad, este reconocimiento está justificado «por su dedicación con el municipio, su entrega y su capacidad para sentirse uno más del pueblo. Los años en los que fue parroco caló bastante en el pueblo, y eso lo reconocen todos, mayores y jóvenes. Ha sido un cura fantástico que revitalizó mucho la Iglesia y consiguió muchas mejoras para el templo. Además, se convirtió en un gran devoto de San Roque, patrón del pueblo, haciendo que los vecinos lo vieran como un tolito más».
Al recibir la noticia del nombramiento, Bellón afirmó acogerla «con mucha alegría y agradecimiento al pueblo y a la parroquia de Tolox. En mi destino durante casi nueve años en las tres parroquias (además de párroco de Tolox lo fue también simultáneamente de Alozaina y Casarabonela), he sido realmente muy feliz y aunque no fue fácil en tantos momentos, siempre me he sentido muy apoyado. Este destino me ha marcado para siempre mi vida de sacerdote».
El nuevo hijo adoptivo de Tolox señala que esta noticia le ha servido para reflexionar sobre «la labor tan buena de nuestros curas diocesanos que han entregado y entregan su vida, con tanta generosidad en nuestras parroquias. Creo que en las parroquias que nos reciben cada cierto tiempo hemos de ponernos en continuidad, por lo bueno recibido y por supuesto, aportando, mientras las servimos, nuestra perspectiva».
En esta labor, recuerda el sacerdote, no ha estado solo: «todas las dificultades se han ido superando gracias a la gente que siempre ha estado dispuesta a colaborar, tirando adelante, ayudando en tantas tareas. Cada Parroquia tiene su impronta, nosotros sumamos a su historia y vida, un capítulo, esperemos que siempre con buena siembra, ya la cosecha, siempre a largo plazo, pero el Señor la va haciendo fuerte y hermosa. Solo puedo agradecer y decir que el cariño es mutuo, por el maravilloso pueblo y parroquia de Tolox y los otros dos pueblos y parroquias de la unidad pastoral».
