Cada una de las partes del álbum tiene 14 fotos, 14 generaciones. Sin embargo, basta con que leamos la Historia de Israel para caer en la cuenta de que eso no es cierto. Es como si Mateo hubiera arrancado alguna de las fotos del álbum, para que en cada una de las partes queden 14.
Pero ¿para qué? ¿Cuál sería su objetivo? Hay varias interpretaciones sobre la cuestión, pero nos vamos a quedar con aquella que pone en el centro el número 7, numero importantísimo en la Biblia, numero de la plenitud. Como vemos, tenemos 3 veces 14, que serían 2 veces 7:
Desde Abrahán hasta el rey David: 14=7+7
Desde el rey David hasta el destierro: 14=7+7
Desde el destierro hasta el Mesías: 14=7+7
Desde Abrahán hasta el Mesías se han cumplido 6 etapas de la historia de 7 generaciones cada una, o lo que es lo mismo, seis septenarios. La llegada de Jesús-Mesías inaugura el séptimo, el definitivo, el tiempo de la plenitud. Nosotros, los que hemos reconocido en Jesús al Mesías, formamos parte de esa etapa de plenitud, por eso no podemos dejar de expresar la alegría que brota de nuestro encuentro con Él: “La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría”. (EG 1).
