La Iglesia de Málaga crea 40 nuevas plazas para ancianos dependientes. La residencia Buen Samaritano, gestionada por la Diócesis de Málaga, inaugura el próximo 27 de noviembre un nuevo pabellón con 40 nuevas plazas.
Este centro abrió sus puertas en 1994 con el objetivo de dar acogida a personas mayores con dificultades para desenvolverse y con escasez de recursos económicos.
Cáritas abrió así en Churriana la primera residencia asistida de Málaga. Buen Samaritano es un centro gerontológico especializado en atender a personas mayores con gran dependencia, que necesitan ayuda para realizar las más básicas actividades de la vida diaria.