El domingo 15 de febrero, la localidad de Villanueva de Cauche, de poco más de 300 habitantes, celebró la confirmación de 19 de sus vecinos de manos del arcipreste de Archidona-Campillos, Rubén Darío Reale.
Como afirma Inmaculada Padilla, una de las confirmadas, «¡Habían pasado ya 50 años! Desde 1965 no se habían celebrado confirmaciones en nuestro pueblo. El Señor siempre ha estado presente, pero este día volvió a derramar su Espíritu sobre nosotros. Nos habíamos preparado con ilusión y esfuerzo, con el padre Antonio Ramos, pues se trata de un encuentro importante con Dios; como dijo el Papa Francisco: «es un sacramento que ratifica la gracia bautismal, nos une más firmemente a Cristo y afianza nuestra relación con la Iglesia, concediéndonos una fuerza especial del Espíritu Santo para defender la fe y confesar el nombre de Cristo». Desde la pequeña Capilla parroquial de la Santa Cruz (anexa al antiguo Palacio del Marquesado de Cauche), no dejamos que se extinga la fe. Ella está impregnada de recuerdos de las celebraciones de los sacramentos de los que nacimos y crecimos aquí. Hace un año, sufrimos el desastre del desplome de la bóveda inversa, que dañó el altar y parte del retablo, y dejó escombros por toda la capilla. Pero nos dedicamos a su restauración y ahora no dejamos de estar pendientes de su cuidado. Creo que como Iglesia, somos una comunidad pequeña, pero viva. Nos une sobre todo nuestra Fiesta principal: la Santa Cruz, el día 3 de mayo. Ahora nos toca, difundir ese «buen olor de Cristo» que recibimos con el Crisma de la Confirmación. Seguro que lo haremos, con la ayuda de nuestros sacerdotes, el padre Luis Alberto Quijada y el padre Antonio Ramos, que nos acompañan y guían en la fe, y de quienes estamos muy agradecidos».