El pasado miércoles 6 de agosto comenzó la novena que la parroquia de Mollina dedica a su patrona. Como cada año, desde hace ya varios siglos, Mollina se vuelca con las fiestas de la la Santísima Virgen de la Oliva, que tendrán su gran día el 15 de agosto.
Todas las tardes, durante la novena, se expone el Santísimo para la adoración y la oración en silencio, con gran participación de fieles.
A las ocho y media comienza la celebración de la Santa Misa, que cada día se dedica a un grupo o realidad pastoral de la parroquia (catequesis, emigrantes, matrimonios, niños y jóvenes, vocaciones sacerdotales y religiosas, etc). Presiden la Misa diferentes sacerdotes de la zona.
El día 15 de agosto se celebrará la Santa Misa solemne a las once de la mañana. Por la tarde, después del pasacalles para recoger a la Hermana Mayor honoraria de este año, comenzará a las diez de la noche la procesión. A ella acuden cada año miles de personas, familias enteras, que quieren acompañar a su patrona, alumbrando el recorrido con velas.
En palabras de su párroco, José Javier García: «Es una experiencia de fe impresionante, digna de ver, que se repite en Mollina desde el siglo XVIII».
