En junio de 2023 los católicos de Melilla celebraban la apertura del Año Jubilar con motivo del 75 aniversario de la coronación canónica de la Patrona y Alcaldesa Honoraria Perpetua de Melilla, Nuestra Señora de la Victoria. El 13 de junio de 2024, el Sr. Obispo, D. Jesús Catalá, clausuraba este tiempo de gracia con una Visita Pastoral.
El miércoles 12 de junio, llegaban a la Ciudad Autónoma el Sr. Obispo acompañado del Vicario General, Antonio Coronado, y comenzó la Visita Pastoral con una jornada dedicada a los diversos sacerdotes que sirven en esta porción de la Iglesia Diocesana, «habló personalmente con cada uno de nosotros y con el diácono permanente Fernando Moreno y compartimos el almuerzo. Al atardecer, celebramos la Eucaristía en la parroquia de Santa Maria Micaela, en la que mantuvo un encuentro con la comunidad parroquial», explica el vicario de Melilla, Eduardo Resa.
El jueves 13 de junio, D. Jesús, acompañado por el vicario general y el vicario de Melilla, visitó el Palacio de la Asamblea, donde mantuvieron un encuentro con el vicepresidente de la Ciudad: «conversaron sobre temas bilaterales de los convenios entre la Ciudad y el Obispado para acometer varias obras, de gran envergadura y alto presupuesto, en varios templos y complejos parroquiales», añade el vicario de Melilla.
Después, acompañados por la consejera de Cultura y el director de Melilla Ciudad Monumental, visitaron la recién restaurada iglesia de la Purísima Concepción. «Antonio Bravo, cronista de la Ciudad dio una explicación pormenorizada de ese templo tan emblemático de Melilla. Al mediodía nos trasladamos a la parroquia de San Agustín para el rezo de la Hora Intermedia y un breve encuentro-coloquio con las religiosas y religiosos de la Ciudad con los que también compartimos el almuerzo. Al atardecer, celebramos la Eucaristía de clausura del Año Jubilar, concelebrada por todos los sacerdotes, y en la que también participaron el presidente de la Ciudad, varios consejeros y diferentes autoridades civiles, militares y judiciales, la Congregación de la Patrona al completo y una gran representación de hermandades y cofradías, así como de fieles de toda la Ciudad», explica Eduardo Resa.
El último día de la Visita, el viernes 14, el Sr. Obispo visitó la Guardería Santa Luisa de Marillac, de la Fundación Victoria, y acudió a la parroquia de San Francisco Javier, en la que mantuvo un encuentro con las 7 comunidades neocatecumenales de la ciudad, con las que celebró también la Eucaristía. A media tarde, el Sr. Obispo y el Vicario General regresaron a Málaga.
Cercanía del pastor
«Para Melilla, y más concretamente para los católicos de Melilla, siempre es un gozo la cercanía del pastor», afirma el vicario de Melilla, pues «hemos pasado momentos muy convulsos, tiempos recios y aún tenemos la impresión de que llueve sobre mojado, por eso, la presencia de D. Jesús ha sido muy reconfortante».
Por otro lado, reconoce que «de cara a las actuaciones en obras urgentísimas que hay que acometer en la parroquia de la Medalla Milagrosa, el patio del cura, Santa María Micaela y el Sagrado Corazón, el contacto directo en esta Ciudad con las autoridades políticas era también muy necesario. Ese contacto siempre se ha dado, pero había que dotarlo de visión ciudadana».
Para Eduardo, como vicario de la Ciudad Autónoma, «tener cerca a quien represento es siempre necesario y alentador. Estamos muy cerca del corazón de la Diócesis, pero el mar es muy profundo y la sensación de soledad, aislamiento y olvido pesa mucho y muy frecuentemente, por eso la presencia de D. Jesús y el compartir unos días con los curas de Melilla era muy necesario. Destacaría su cercanía con nosotros, su disponibilidad para hacerse presente donde se le ha pedido y, sobre todo, esa clausura solemne del Año Jubilar de la Patrona. Sólo me queda dar las gracias al Sr. Obispo y al Vicario General».