La plaza Menéndez Pelayo de Melilla fue el lugar elegido para celebrar la mañana del viernes, 18 de agosto, un acto por la Paz con una mesa interconfesional, a la que acudieron cientos de personas, tras los atentados de Barcelona y Cambrils.
El vicario Episcopal de Melilla, Roberto Rojo, explicó que «el encargado de encender el cirio ha sido un miembro de la comunidad musulmana. Hemos encendido las velas en señal de paz y que Dios ilumine nuestros corazones. Hemos pedido al Dios de la creación misericordia y paz y nos ayude a construir esta paz entre los hombres para que podamos vivir en la unidad y en el diálogo. Tras ello, hemos guardado un minuto de silencio y nos hemos dado un abrazo en señal de paz».
Beatriz Lafuente