El “Cura Pepe”, como se le conoce en Marbella, tendrá una calle dedicada a él en el municipio en el que ha servido durante trece años como párroco de la Encarnación y capellán del hospital Costa del Sol. Se trata de una vía perpendicular a la glorieta Manuel Haro desde la que se accede al puerto de La Bajadilla.
La alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, ha destacado «su actitud, entrega y solidaridad» que han hecho «crecer a la ciudad». En nombre de la corporación municipal, Muñoz define a José López Solórzano como una persona con una trayectoria «eminentemente social, muy humana y llena de desinteresada entrega a los demás». Durante su ministerio pastoral en la ciudad, se aprobó el nombramiento de la Virgen del Carmen como patrona de la ciudad, se impulsó el bazar de Cáritas y se protegió el patrimonio religioso y cultural de Marbella con la restauración del tejado de la parroquia de la Encarnación, la casa parroquial y la ermita del Santo Cristo. Durante la pandemia, José se implicó en primera linea para ayudar a miles de familias en Marbella y San Pedro, que no lograban cubrir sus necesidades básicas. «Es un merecido reconocimiento que recoge ek sentir de muchos vecinos», afirma la alcaldesa.
José López Solórzano cuenta desde hace 24 años con una calle en Vélez, donde sirvió de cura siete años, y en 2020 le dedicaron otra en Estepona, donde fue párroco durante nueve años.
En la actualidad, José es párroco del Corpus Christi y Nuestra Señora de Gracia en la capital, además de canónigo de la Santa Iglesia Catedral.
