El Sr. Obispo preside este lunes, 16 de julio, la Eucaristía en la que se proclamará a la Virgen del Carmen como patrona de Marbella y se bendecirá el nuevo retablo del templo de Nuestra Señora de la Encarnación, en Marbella, sede de la imagen de la Virgen del Carmen.
La ciudad de Marbella ha tenido hasta ahora dos patronos: San Bernabé y San Pedro de Alcántara, que se celebran el 11 de junio y el 19 de octubre, respectivamente.
Pero, desde mañana cuenta con una patrona más: la Virgen del Carmen. El arcipreste de la zona, José López Solórzano, que es también el párroco de Nuestra Señora de la Encarnación, afirma que, «al llegar a Marbella, hace cinco años, comprobé que la devoción de este pueblo por la advocación mariana estaba muy arraigada, así que hicimos un dosier avalado por las parroquias, hermandades y cofradías, asociaciones y hasta el Ayuntamiento, en el que se certificaba que esta devoción era singular. El Sr. Obispo escuchó la propuesta y decidió aprobar el nombramiento de patrona».
Los actos con motivo de esta fiesta comenzaron el pasado 5 de julio y concluirán mañana con un día de fiesta intensivo, en el que participará el Sr. Obispo, D. Jesús Catalá, presidiendo la Eucaristía, a las 10.30 horas.
En palabras del arcipreste, «la visita del Sr. Obispo es una alegría para Marbella, además en un día tan importante como es el reconocimiento de una advocación mariana tan querida para este pueblo».
La Virgen del Carmen, la Estrella de los Mares, la Virgen marinera guiará los pasos de los vecinos de Marbella hacia el Señor, como patrona de la ciudad.
EL OBISPO DE MÁLAGA PRESIDE LA EUCARISTÍA
Las siete parroquias de la zona van a participar de forma activa en la novena a la Patrona. Cada día preside la Eucaristía uno de los párrocos, que acude con los grupos de catequesis, liturgia o Cáritas de su parroquia. Los actos conmemorativos comenzaron el día 5 de julio. Entre ellos encontramos la celebración del sacramento de la Unción de Enfermos en la Eucaristía de la novena.
Este domingo, 15 de julio, a las 20.00 horas tendrá lugar la Misa de Hermandad en la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación. A las 20.45 horas, la procesión nocturna con la imagen de la patrona, desde la parroquia hasta la lonja del puerto pesquero, donde le harán una ofrenda floral.
El lunes 16 de julio, a las 8.30 horas, tendrá lugar el rosario de la aurora y volverán con la imagen a su templo.
A las 10.30 horas, el Sr. Obispo presidirá la Eucaristía en la que se proclamará patrona de Marbella a Nuestra Señora del Carmen y se bendecirá el nuevo retablo de la Patrona.
A las 18.00 horas saldrá la procesión del templo de Nuestra Señora de la Encarnación, se dirigirá al Puerto Deportivo del Club Naútico y la trasladarán al Puerto Deportivo José Banús. Se realizará una ofrenda por todos los marineros desaparecidos en el mar.
La procesión regresará por tierra al templo y en la entrada al Puerto Deportivo se bendecirá el monolito de la Virgen del Carmen que presidirá la entrada al puerto que se llamará «Puerto Deportivo Virgen del Carmen».
SIETE MIL EUROS PARA LAS CÁRITAS PARROQUIALES
Siete mil euros para las Cáritas parroquiales Con motivo de la proclamación de la Virgen del Carmen como patrona de Marbella, la Hermandad del Carmen donará 1.000 euros a cada una de las siete Cáritas parroquiales de la zona: en Marbella Nuestra Señora de la Encarnación, Santo Cristo del Calvario y Divina Pastora; en Las Chapas, Virgen del Carmen; en Nueva Andalucía, Virgen Madre y en San Pedro de Alcántara San Pedro de Alcántara y Virgen del Rocío. Como afirma el arcipreste, José López Solórzano, «no se trata sólo de festejos, sino de un acto de generosidad puesto en marcha por una hermandad sencilla».
DECLARACIONES DEL PÁRROCO
El párroco de Nuestra Señora de la Encarnación de Marbella y arcipreste de Marbella, afirma que «con la proclamación de la Virgen del Carmen como patrona de Marbella lo que hacemos es reconocer y recoger la fe de un pueblo. Llevo cinco años como párroco de Nuestra Señora de la Encarnación de Marbella y soy testigo de la devoción de esta imagen en el pueblo de Marbella, sobre todo entre la gente más sencilla y en el mundo marinero. Como sacerdote, es una satisfacción haber sido instrumento para que esta fiesta sea posible».
