“Dad gracias al Señor porque es bueno” es el lema elegido para la celebración de este año, que comenzó el martes 28 de noviembre en un abarrotado Teatro Miguel de Cervantes con una pública manifestación de agradecimiento a Dios por esta institución educativa.
En el acto de apertura participó una amplia representación de la comunidad educativa, así como el Obispo de Málaga, Monseñor Jesús Catalá, el Cardenal Fernando Sebastián y los alcaldes de Málaga y otros municipios de la provincia, entre otras muchas autoridades civiles y religiosas.
Tras la oración inicial, los asistentes disfrutaron de una proyección con testimonios de diferentes personas que vivieron la fusión de los tres patronatos de enseñanza y la creación de la actual Fundación.
El primero en intervenir fue el Presidente de la Fundación Victoria, Muy Iltre. Sr. D. José A. Sánchez, quien agradeció el empuje que los distintos obispos han dado a los Colegios Diocesanos, herederos de una historia centenaria que sigue viva gracias a la labor de todos los que conforman la gran “familia” de la Fundación «Sin duda, una obra de Dios. Gracias Señor de todo corazón». Francisco de la Torre, Alcalde de Málaga, por su parte, dirigió a los presentes unas cariñosas palabras de agradecimiento por la labor educativa desempeñada en la ciudad, especialmente en las zonas más deprimidas.
La nota musical llevó la firma de Monseñor Marco Frisina, quien dirigió a la Orquesta Filarmónica de Málaga que, acompañada por la Coral Carmina Nova, las escolanías del Corpus Christi y del colegio Las Chapas (Marbella) y la solista Berna Perles interpretó un avance del oratorio “Passio Christi” bajo la batuta del propio compositor italiano.
Tras el descanso, el cardenal Fernando Sebastián, en un diálogo con el presentador del acto, el periodista Pepelu Ramos, habló del derecho de la Iglesia a estar en el mundo de la enseñanza, «negarle ese derecho es negar a Cristo el derecho a estar presente en el mundo», dijo. Para el cardenal Sebastián, la clave del éxito de la Fundación es que tiene a Jesús como centro, para concluir afirmando que «El sorprendido y agradecido soy yo cuando veo la importancia de la Fundación tantos años después».
Tras él, y animados por los personajes de títeres de la compañía de Miguel Pino “Peneque”, más de un centenar de alumnos y una orquesta formada por padres, profesores y antiguos alumnos, interpretaron, bajo la batuta de Mons. Frisina y junto a las escolanías presentes, las piezas “Preferisco il Paradiso” y “Jesus Christ you are my life”, cantos a los que se unió todo el auditorio.
El Obispo de Málaga fue el encargado del cierre, comenzando su alocución con un cariñoso recuerdo a su antecesor, el fallecido Obispo D. Antonio Dorado. Sus palabras fueron dirigidas a animar a toda la familia de la Fundación a proseguir con su misión de educadores desde la luz del Evangelio y a mirar hacia el futuro. «Tenemos un futuro de esperanza», dijo, antes de impartir la bendición a los presentes.
El canto a la Virgen “Bajo tu amparo” hizo de punto y final al acto
Galería de fotos del acto. Fotos: J. Isla
Ana María Medina