El Premio creado por el humanista, pensador, y poeta madrileño Fernando Rielo, fundador de los Misioneros y Misioneras Identes, presentes en la Diócesis de Málaga, cumple 33 ediciones, convocando a la sociedad a la vivencia de los altos valores que la poesía mística expresa, uniendo calidad literaria y riqueza espiritual, para contribuir a la superación de la situación crítica que atravesamos.
Los autores seleccionados, junto con otros diez finalistas, han sido elegidos de un total de 264 poemarios procedentes de 29 países de África, América, Asia y Europa, y optan al galardón final, que se dará a conocer el próximo 12 de diciembre en Quito, Ecuador.
Las obras finalistas (por orden alfabético de sus autores) del XXXIII Premio Mundial Fernando Rielo de Poesía Mistica son:
A la sombra de tus alas de Gabriel Chávez Casazola, (Santa Cruz de la Sierra – Bolivia)
El encuentro sagrado de Blanca Fernández de la Fuente, (Boadilla del Monte – Madrid, España)
Hablan de Ti las rosas de José Ganivet Zarcos, (Santa Fe – Granada, España.)
La iluminación del silencio de Rafael Gómez Pardo, (Bogotá, Colombia)
A través de las sombras de Marlon F. Guerra Tejera, (Miami – Florida, USA)
Si por vosotros ha pasado de Fernando Jiménez Hernández-Pinzón (Córdoba, España)
The terraced mountain de W. F. Lantry, (Washington, DC – Estados Unidos)
Miradas de Jesús Martínez García (Zaragoza, España)
En la tierra como en el cielo de Fernando Raúl Matiussi, (Tafí Viejo – Tucumán, Argentina)
Espinas en los ojos y siete poemas de barro de Hugo Francisco Rivella (Córdoba – Argentina)
Besar tu claridad de Soledad Sánchez Mulas, (Salamanca, España)
Mi alma y yo de Lucrecio Serrano Pedroche, (Albacete, España)
La proclamación de la obra galardonada del XXXIII Premio Mundial Fernando Rielo de Poesía Mística, dotado con 7.000 euros, publicación de la obra y medalla conmemorativa, se celebrará el próximo 12 de diciembre, en Quito (Ecuador) en la Sede de la Universidad Técnica Particular de Loja.
El Jurado ha destacado el gran nivel de las doce obras finalistas. Se adjunta el juicio previo que les han merecido.
El Comité de Honor de esta XXXIII edción está integrado por las siguientes personalidades: Los acdémicos: Excmo. Sr. D. Marcelino Oreja Aguirre, Presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, Excmo. Sr. D. José Manuel Blecua Perdices, Director de la Real Academia Española, Excmo. Sr. D. Gregorio Salvador Caja, Excmo. Sr. D. Francisco Brines Baño, Excmo. Sr. D. Luis María Anson Oliart, Excma. Sra. Dª. Inés Fernández-Ordóñez, Excmo. Sr. D. Luis Alberto de Cuenca y Prado, Miembro de la Real Academia de la Historia y poeta, Excmo. Sr. D. Bernard Sesé, Académico correspondiente de la Real Academia Española, Sr. D. Ramón Pernas López, Miembro de la Academia Pontificia Auriense-Mindoniense de San Rosendo y escritor; por los Rectores: Excmo. Sr. D. César Nombela Cano, Rector Magnífico de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, Excmo. Sr. D. Ángel Galindo García, Rector Magnífico de la Universidad Pontificia de Salamanca, Excmo. Sr. D. José Mª Sanz Martínez, Rector Magnífico de la Universidad Autónoma de Madrid, Excmo. Sr. D. Julio Luis Martínez Martínez, SJ, Rector Magnífico de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, Excmo. Sr. D. Javier María Prades López, Rector Magnífico de la Universidad Eclesiástica San Dámaso (Madrid), Excmo. Sr. D. Juan Carlos Domínguez Nafría, Rector de la Universidad CEU San Pablo, Excmo. Sr. D. José Barbosa Corbacho, Rector Canciller de la Universidad Técnica Particular de Loja (Ecuador); y por los poetas: Excmo. Sr. D. Juan Van Halen Acedo, Presidente de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles, Ilmo. Sr. D. Joaquín Benito de Lucas, Catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid, Ilmo. Sr. D. Andrés Sánchez Robayna., Catedrático de la Universidad de La Laguna, Ilmo. Sr. D. Jaime Siles Ruiz, Catedrático de la Universidad de Valencia y D. José Javier Aleixandre.
POESÍA MÍSTICA
En palabra poética del creador del Premio, Fernando Rielo: «El poeta místico encarna una gran misión: romper la máscara que oculta el llanto de una humanidad que busca su destino. El poeta es así profeta que, haciéndose gemido, clama, amantísimo, la compasión de un cielo soñado. Este gemido se impone a una vida errante que el poeta asume con la fuerza de su ínsita soledad.»
En palabras del creador del Premio, Fernando Rielo: «La poesía mística tiene por finalidad la confesión de la fe… La poesía mística en ningún caso es reductiva: eminentemente creativa, es susceptible de engendrar nuevos recursos estilísticos, nuevas formas y, en general, una riqueza inagotable para expresar, por medio de la imagen estética, la mística unión del alma con su Creador. La poesía mística es también visión universal y transcendental de una humanidad que, en dolor y en amor, camina hacia su celeste destino».
El reconocimiento alcanzado por el Premio Mundial Fernando Rielo de Poesía Mística ha permitido que la ceremonia de entrega del mismo se haya celebrado en sedes internacionales tan prestigiosas como la ONU en New York, el Senado de Francia y la Unesco en París, el Ayuntamiento de Roma, la Sala Gótica del Ayuntamiento de Colonia, el Museo del Prado, el Ayuntamiento de Madrid, la Sala del Consejo de la Provincia de Bolonia y la Embajada de España cerca de la Santa Sede.
Cada año cuenta con el apoyo de un amplio Comité de Honor compuesto por miembros de diversas Reales Academias (Lengua, Historia, Ciencias Morales y Políticas), Rectores de Universidades, hispanistas, escritores y poetas. A este Comité han pertenecido personalidades civiles de la talla de Sédar Senghor, Dámaso Alonso, Manuel Alvar, Zamora Vicente, Torrente Ballester, García Yebra, José Hierro y Antonio Mingote; y eclesiásticas como los cardenales Poupard, Ruini, Biffi, Cañizares y Rouco.
Entre los galardonados de ediciones anteriores están los españoles: José García Nieto, Luis López Anglada, Miguel de Santiago, José Javier Aleixandre, el senegalés Charles Carrère); el judío uruguayo Daniel Ben Rafael Stawski; el griego Takis Varvitsiotis (Grecia); el macedonio Mateja Matevski o la chilena Irma Bettancourt.