El 21 de febrero, 11 personas han sido elegidas por el Obispo para continuar el camino que les llevará al Bautismo, Confirmación y Eucaristía en esta Pascua próxima.
El Rito de Elección de Catecúmenos abre la puerta a la vida cristiana mediante los sacramentos de Iniciación a aquellas personas que solicitan ser incorporadas a la Iglesia católica.
En esta ocasión, los catecúmenos procedían de las parroquias de San Gabriel, Nuestra Señora del Pilar, Nuestra Señora de la Paz, La Encarnación y Santa Cruz y San Felipe Neri, de la capital; y de Nuestra Señora de los Dolores (Puerto de la Torre), Santiago Apóstol (Antequera), Santa María del Mar (Torremolinos), Nuestra Señora del Carmen (Estepona) y Santa Ana (Benamocarra). Acudieron acompañados por sus padrinos, catequistas, así como por algunos de los sacerdotes que están acompañando su proceso.
Tras ser acogidos en la puerta, se celebró la Eucaristía con el Rito de Elección,
Durante la homilía, D. Jesús les dijo: «queridos catecúmenos, estáis llamados por el Señor que os ha invitado a seguirle. Vuestro corazón ha sido iluminado por su presencia y por su amor. Hoy manifestáis ante la Iglesia vuestra voluntad de seguir a Cristo, como Dios y Señor. ¡Que el Espíritu, que empujó a Jesús al desierto, y estuvo con Él para vencer las tentaciones, os acompañe en el proceso personal de conversión y en el camino cuaresmal hacia la Pascua! Y a todos nosotros, que hemos iniciado la Cuaresma, nos prepare para renovar las promesas bautismales».
Al finalizar la misma, el Obispo les hizo entrega de los evangelios. Como explica Felipe Reina, canónigo y responsable del Catecumenado en la Diócesis, «han estado preparándose durante meses en su parroquia, y ahora les corresponde hacer los escrutinios en sus respectivas comunidades durante los domingos de Cuaresma. En el último se les ungirá con el óleo de los catecúmenos, previo a la celebración de los sacramentos de Iniciación Cristiana: bautismo, confirmación y Eucaristía, que el Obispo recomienda que celebren en la Vigilia Pascual, a ser posible, o uno de los domingos del tiempo de Pascua».
Ana María Medina