Con la llegada del verano zonas de la costa malagueña como La Cala del Moral ven incrementado su número de vecinos que pasan allí sus vacaciones estivales. Este aumento también se nota en la parroquia de Nuestra Señora del Rosario donde su párroco, Rafael Rodríguez, aumenta el número de misas para dar respuesta a la demanda de los participantes.
–¿Nota la afluencia de más fieles durante los meses de verano a su parroquia?
–La Cala del Moral ha sido tradicionalmente lugar de veraneo de los malagueños, ya que muchos tienen aquí su casa de verano. A partir de las vacaciones escolares muchos trasladan su residencia a La Cala hasta el inicio del periodo escolar y por ello aumenta considerablemente la participación en la misa tanto diaria como dominical.
–¿Suelen acudir también extranjeros que pasan el verano en la zona?
–Algunos nativos caleños vuelven en verano, pero son pocos en relación a los veraneantes malagueños. Respecto a la población extranjera es mínima, algún italiano, francés,… que se hospeda en alguno de los dos hoteles que hay en La Cala, pero suelen ser pocos.
–¿Cuál suele ser el número de fieles que acude habitualmente a la parroquia? ¿En cuántos se incrementa en esta época del año?
–Ciertamente hay un incremento de participantes, que se nota en las tres misas que hay los domingos, pero sobre todo cuando más afluencia hay es en la misa de la tarde del sábado y del domingo.
–¿Cómo se adapta la parroquia a estas necesidades? ¿Se aumenta el número de misas?
–Después del día del Carmen y hasta el último fin de semana de agosto, se añade una misa por la tarde, es decir sábado y domingo por la tarde celebramos misa a las 20.00 y a las 21.00 horas.
Inmaculada Prieto
