En su primer lustro, la Escuela de Idiomas de los colegios diocesanos de Málaga, Foovy, celebra su 5º aniversario con más de 1.500 alumnos inscritos en el presente curso escolar y experiencias pioneras en el aprendizaje de inglés y francés.
Iniciativas como el programa Trinity Stars para fomentar y evaluar el proceso de enseñanza en niños de 3 a 6 años de edad a través de la expresión oral, la música y la dramatización o el Teens Club, colectivo donde se desarrollan actividades de inglés específicas para alumnos mayores de 12 años, se han puesto en marcha por primera vez en Málaga.
Foovy es una escuela de idiomas abierta a la sociedad malagueña con más de 60 docentes que imparten clases en colegios diocesanos y parroquias a alumnos desde los 2 años de edad a la edad adulta. Miles de estudiantes se han formado desde que iniciara su andadura en Málaga, de los que más de un millar han preparado y superado con éxito los exámenes oficiales de Cambridge y Trinity, siguiendo la metodología impartida en la Escuela de Idiomas de Fundación Victoria.
El programa de actividades en paralelo a las clases es muy diverso desde los primeros años de existencia de Foovy. Así, unos 3.000 alumnos han participado en los campamentos bilingües temáticos -en Semana Blanca y verano-; se llevan a cabo cursos de inmersión lingüística a Irlanda e Inglaterra; un elenco de estudiantes se ha convertido en protagonistas de una serie de ficción en inglés de producción propia que se emite en YouTube, Foovywood Road; entre otras iniciativas que cuentan cada curso escolar con mayor número de seguidores.
Potenciar las competencias lingüísticas y comunicativas de los escolares en otros idiomas; reforzar su seguridad cuando se expresan en una lengua extranjera; ampliar el conocimiento de otras culturas, entre otros aspectos, son algunas de las características que destacan en las diferentes actividades que se organizan desde Foovy. No obstante, su seña de identidad diferenciadora viene dada por la entidad educativa a la que pertenece. A los valores que se transmiten al alumnado como Fundación Victoria, se le añaden la pasión y la diversión que los docentes comparten y que atraen la motivación necesaria para impulsar el aprendizaje de los estudiantes