D. Jesús Catalá invita a toda la comunidad diocesana a unirse a las reiteradas peticiones del papa Francisco de oración en favor de los emigrantes y cristianos perseguidos. De forma especial, en el tiempo que transcurre desde la Ascensión del Señor hasta Pentecostés.
Entre las propuestas de oración para este tiempo se sugiere introducir en la Oración Universal de la Santa Misa esta petición u otra semejante: «Por nuestros hermanos cristianos perseguidos: para que el Espíritu Santo les conceda el don de la fortaleza y convierta los corazones de quienes atentan cruelmente contra sus vidas y sus tierras, y en todas partes se afirme la paz y sea respetada la libertad religiosa. Roguemos al Señor».
También se recomienda añadir en las preces de Laudes y Vísperas esta petición u otra semejante: «Envía, Señor, a la Iglesia y a la humanidad tu Espíritu de Amor para que desaparezcan las disensiones y los odios y los cristianos puedan convivir en paz y armonía con todos los hombres».
A todos los párrocos les ha llegado una convocatoria para realizar el día 29 de mayo una celebración de la Santa Misa en la que se use el formulario «por los cristianos perseguidos» (Misas por diversas necesidades no 15) y se elijan las lecturas de entre las que se proponen en el Leccionario IV: Lecturas para las misas por diversas necesidades y votivas, en el capítulo 12: «Por los cristianos perseguidos».
Así mismo, Mons. Catalá invita a todo el pueblo cristiano a que una esta misma intención en su oración diaria y en los lugares donde se exponga el Santísimo Sacramento. De igual modo, ante el terrible drama de la emigración, que oremos por los emigrantes y, se celebren actos de oración comunitaria por estos hermanos.
