Reflexión de Andrés Serrano, responsable de los diáconos permanente de la Diócesis de Málaga, sobre la actualidad de este ministerio en la Iglesia malagueña
En la sociedad que vivimos hay muchas necesidades sociales, económicas, psicológicas, emocionales y espirituales. La Iglesia de Málaga que dirige nuestro obispo, D. Jesús tiene una gran misión y para ello, cuenta entre otros, con un grupo de diáconos permanentes.
En la tarea diaria, sobresale la caridad, estando en situación de escucha, acompañamiento, empatía y ayuda para solucionar los problemas de los más pobres y necesitados. Se trata de acompañar al sacerdote y a toda la comunidad parroquial, especialmente a los pobres y enfermos, en la liturgia, la palabra y los oficios de caridad. Llevando la cercanía de Dios sirviendo con humildad y alegría a través de cualquier trabajo que nos toque hacer.
Nuestro trabajo se realiza principalmente por medio de Cáritas, Pastoral de la Salud y demás grupos parroquiales que necesitan de nuestra labor gratuita. Ofrecemos tiempo, acompañamiento y esperanza, para solucionar problemas como los que sufren las familias de nuestro entorno en Málaga y Melilla, las personas sin hogar, etc. Nuestra implicación es una obligación y una responsabilidad, a la que nos entregamos por amor a Dios, a la Iglesia y a los hermanos
Málaga tiene en la actualidad 22 diáconos permanentes repartidos en las parroquias de Málaga capital (16), Melilla (1) y provincia (5).
Y en cualquier necesidad, ver y amar al Señor.
Andrés Serrano
Diácono permanente
