
Comienza su andadura el Consejo General de la Iglesia en la Educación en España. El martes 20 de mayo quedó constituido el Pleno del Consejo (CGIE) y el miércoles 21 se celebró la sesión constitutiva del Seminario Permanente. Con ello la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura quiere dar continuidad al camino que se emprendió en el Congreso La Iglesia en la Educación. Presencia y Compromiso, de febrero de 2024. Uno de los miembros de este Consejo es el profesor de los Centros Teológicos y profesor de Religión José A. Fernández Martín.
El pasado martes, 20 de mayo, quedó constituido el Pleno del Consejo General de la Iglesia Educación, con la asistencia de la práctica totalidad de sus 60 miembros que representan los diversos ámbitos educativos en los que la Iglesia está presente. La sesión, celebrada en Madrid, fue presidida por Mons. Alfonso Carrasco Rouco, presidente de la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura. En esta primera sesión de trabajo del Consejo se presentó su regulación y los consejeros fueron identificando algunos desafíos, en cada uno de sus ámbitos, en este momento actual, que los proyectos educativos de la Iglesia deben atender.
Al día, siguiente, miércoles 21 de mayo, se celebró la sesión constitutiva del Seminario Permanente de este Consejo que será el encargado de organizar los trabajos y hacer el seguimiento de sus objetivos. El trabajo se centró en priorizar los desafíos sobre los que el CGIE deberá trabajar haciendo un diagnóstico riguroso del momento presente y formulando posibles respuestas desde la misión educativa de la Iglesia.
Fruto del Congreso La Iglesia en la Educación
Este Consejo, que está dando sus primeros pasos, todavía ad experimentum, es fruto del Congreso La Iglesia en la Educación, celebrado en febrero de 2024, y es expresión de la urgencia sentida de cuidar la presencia y el compromiso de la Iglesia en la Educación en el momento actual. Se espera que a lo largo de este año 2025 comience a desarrollar su naturaleza y sus fines. El CGIE es un espacio para ahondar la misión educativa de la Iglesia en todas sus presencias, aprendiendo unos de otros, y enriqueciéndonos del camino compartido para mejorar nuestro servicio a la sociedad.
El Consejo General de la Iglesia en la Educación es expresión de la responsabilidad que los obispos españoles asumen con la educación Católica en España, a la luz y en el espíritu de la Declaración del Concilio ecuménico Vaticano II Gravissimum educationis, sobre la base de las normas del Código de Derecho Canónico, en particular de los cánones 793-821, y según las indicaciones de la Instrucción La identidad de la escuela católica para una cultura del diálogo de 2022 de la Congregación para la educación católica.
La finalidad del Consejo es dotar a la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura de un instrumento de relación, coordinación, participación y reflexión de las entidades e instancias eclesiales implicadas en la educación católica.
Con el CGIE, la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura ofrece un ámbito de participación, diálogo y trabajo en común que pretende implicar a las asociaciones, federaciones y entidades de los numerosos actores que contribuyen a la misión educativa de la comunidad cristiana; con la finalidad de apoyar el camino de la educación católica y promover una coordinación orgánica que permita mejorar la acción educativa de la Iglesia en la sociedad y su articulación en la pastoral.
José A. Fernández es Licenciado en Ciencias Religiosas y Diplomado en Educación Infantil. Profesor de Religión desde 1992 en todas las etapas educativas, de Didáctica de la ERE y coordinador DECA en el ISCR San Pablo (Málaga), profesor de Pedagogía y Didáctica de la Religión en el CESET, y uno de los administradores de la versión web de la revista Religión y Escuela (PPC): religionyescuela.com. También es formador de profesores con más de 600 horas de ponencia y autor de cinco libros, coautor en otros y con más de una veintena de artículos. Especialista TIC, en Competencias y Programación entre otros ámbitos.
Él explica a diocesismalaga.es en qué consiste este servicio:
¿Qué desafíos observa en la educación en este momento?
Vivimos un momento de profundos cambios sociales, tecnológicos y culturales que impactan directamente en la educación. Uno de los grandes desafíos es cómo acompañar a nuestros alumnos en el desarrollo de un pensamiento crítico y profundo en medio de una cultura de la inmediatez y la superficialidad. A esto se suma la creciente complejidad de la convivencia escolar, la necesidad de responder a una diversidad cultural y religiosa cada vez mayor, el reto de integrar las nuevas tecnologías de manera ética y pedagógica, el objetivo de reducir brechas con los más vulnerables, recuperar el papel de la familia como el primer y más importante educador para un niño y mostrar ante la sociedad la importancia fundamental que tienen los docentes.
Además, la asignatura de Religión acomete el desafío de mostrar su pertinencia y su valor en la formación integral del alumnado. En un contexto en el que muchas veces se cuestiona su presencia en el currículo, es esencial recordar que la Religión no es un añadido, sino una asignatura que ayuda a comprender las raíces culturales, los grandes interrogantes del ser humano y la propuesta humanizadora del Evangelio.
¿Qué cree que puede aportar el Consejo? ¿Qué esperanzas le despierta su creación?
El Consejo General de la Iglesia en la Educación es una oportunidad única para articular, visibilizar y renovar la presencia de la Iglesia en el ámbito educativo. Su constitución podría calificarse como un hecho histórico tanto para la Conferencia Episcopal Española como la para Educación Católica en este país. Puede convertirse en un espacio de escucha, diálogo y propuesta, que permita construir puentes entre la comunidad educativa y la comunidad eclesial, entre la tradición cristiana y los retos del presente.
Tengo la certeza de que este Consejo impulse una visión educativa humanista, promoviendo una verdadera formación integral, centrada en la dignidad de la persona y abierta a la trascendencia. Espero que dé voz a los docentes que cada día, desde la discreción y el compromiso, impulsan una renovación pedagógica centrada en el alumnado, acompañándoles en sus procesos vitales y formativos. Y deseo que contribuya también a fortalecer la vocación educativa y eclesial, la formación y el reconocimiento, del profesorado de Religión, figura clave para llevar adelante una enseñanza religiosa de calidad y con sentido.
En su ámbito concreto (profesorado de Religión en la escuela pública), ¿qué cree usted que puede aportar a la finalidad del Consejo?
Desde mi experiencia como profesor de Religión durante más de tres décadas en la escuela pública y formador de actuales y futuros docentes de Religión, puedo aportar una visión realista, cercana y comprometida con la realidad educativa. Conozco de primera mano los retos, las inquietudes y también las esperanzas del profesorado de Religión, que trabaja con profesionalidad en contextos muy diversos, a veces no exentos de dificultades, pero siempre con vocación de servicio y fidelidad a su misión eclesial.
Puedo aportar también propuestas concretas para fortalecer nuestra asignatura: desde la mejora en la formación inicial y permanente, hasta la elaboración de materiales didácticos innovadores que conecten con el lenguaje y las preguntas de los alumnos. Creo que es fundamental defender la presencia digna de la Religión en el currículo, como espacio de reflexión sobre el sentido de la vida, los valores y la dimensión espiritual del ser humano, además de favorecer el diálogo fe – cultura, reivindicando la relevancia académica y cultural del hecho religioso,.
Mi deseo es representar a este colectivo con humildad, pero con firmeza, y colaborar para que el Consejo sea un instrumento eficaz al servicio de una educación más humana, más justa y más abierta a Dios.