Hace un año, por estas fechas, la portada de la revista diocesana recogía el SOS lanzado por las Hijas de la Caridad que gestionan el comedor Santa Teresa en Palma-Palmilla tras la disminución significativa de la subvención que recibían por parte de la Junta de Andalucía.
«Las hermanas han tenido que venir haciendo auténticos juegos malabares para poder darle de comer durante tanto tiempo a tantas personas»
Se verían abocados al cierre si no se solucionaba pronto. Finalmente, esta semana, la gran familia de trabajadores, voluntarios y usuarios del comedor pudieron respirar aliviados tras el anuncio de una nueva partida para comedores sociales de toda Andalucía. La psicóloga del centro, María del Mar Ramírez nos lo contó en El Espejo de COPE Málaga.
«Teniendo en cuenta, –ha explicado Ramírez– que durante este tiempo de pandemia, además, se ha duplicado el número de personas que se atendía y que llevamos sin recibir subvenciones públicas, en concreto la de Garantía Alimentaria, desde el ejercicio anterior, las hermanas han tenido que venir haciendo auténticos juegos malabares para poder darle de comer durante tanto tiempo a tantas personas. Gracias a Dios, Él provee y hemos ido capeando el temporal como se ha podido
Con el nuevo reparto de subvenciones, la psicóloga afirma poder seguir atendiendo al 100% de las personas que venían atendiendo hasta ahora, aunque en la actualidad el comedor está cerrado para evitar contagios y son los propios usuarios quienes vienen a recoger la comida y se la llevan a sus casas. «Además hemos recibido muy buenas noticias de parte de la propia delegada que nos citó a la mayor parte de los representantes de comedores sociales de Málaga y nos explicó que esta ampliación presupuestaria para toda Andalucía ha partido precisamente de la provincia de Málaga gracias a la plataforma que se creó en verano y en la que se le hizo llegar la situación tan complicada en la que se encontraban todos los comedores de Málaga y provincia. Ella pidió un informe con los datos objetivos y ha empezado a trabajar y, gracias a Dios pues al final se he traducido en esta ampliación presupuestaria. ¡Ha sido una sorpresa estupenda!», concluye.
Antonio Moreno Ruiz