Sumergidos en el año de la Misión diocesana, éste mes de mayo hemos podido gozar de la presencia maternal de la Virgen María, la primera discípula misionera y el modelo que nos acerca a Jesús.
Cada jueves de mayo, con la Virgen de Fátima, hemos celebrado la Eucaristía en barrios distintos del pueblo de Génave. En este mes de mayo también han tenido lugar las primeras confesiones de algunos de nuestros niños y la primera Comunión de dos niños. Sin duda, el momento más esperado para Génave es ése último sábado para celebrar la romería en honor de su Patrona, la Virgen del Campo, en su ermita. En este mes también celebramos a San Isidro, el patrón de los agricultores.
No nos podemos olvidar del día de la Pascua del Enfermo, fue en la Residencia de Mayores de Génave donde se celebró la Misa y el sacramento de la Unción a un gran número de personas, sin duda, un día emotivo y especial con nuestros enfermos y mayores.
El mes de mayo acababa este año, con motivo del año misionero, con una procesión de candelas nocturna con nuestra Virgen de Fátima, donde pudimos rezar el Rosario y darle gracias a María por este mayo misionero.
Seguimos llenos de ilusión viviendo la Misión, ahora es momento de dar gracias a la Virgen María por su testimonio y pedirle que nunca nos cansemos de llevar la Buena Noticia a cada rincón.
