Fraterno e ilusionante son los adjetivos que mejor definen el último encuentro de la Delegación de Apostolado Seglar. Tras varios meses de reuniones telemáticas y mucho trabajo en red, finalmente los seis miembros que conforman el equipo diocesano de Apostolado Seglar tuvieron la oportunidad de abrazarse en Úbeda el pasado 9 de junio.
Acogidos por la parroquia Santo Tomás Apóstol, la reunión comenzó con una oración comunitaria en torno al texto paulino que recordó que «los miembros son muchos, el cuerpo es uno solo» (1Co 12, 20). A partir de ahí, brotó en la oración la importancia y la complementariedad de cada una de las delegaciones de nuestra Diócesis del Santo Reino, así como la necesidad de apoyarnos unas en otras para el anuncio del kerygma. A continuación, el equipo procedió a evaluar el camino recorrido en el presente curso, así como a definir algunas cuestiones y prioridades de cara al próximo curso pastoral.
Coordinados por el ubetense D. Antonio José Campos Martínez, Delegado diocesano de Apostolado Seglar, el equipo comenzó su andadura el pasado enero para revitalizar e impulsar el papel de los laicos en nuestra Diócesis, proceso en el que está inmersa la Iglesia en España tras el Congreso de Laicos celebrado en febrero de 2020. El equipo de nuestra Diócesis es heterogéneo en cuanto a sexos, edades, estado civil, profesiones, trayectoria y realidades eclesiales, pretendiendo ser una muestra de la diversidad y riqueza de nuestra Iglesia de Jaén.
En la asamblea diocesana del próximo sábado, 17 de junio, se podrá compartir en el café-tertulia con los miembros del equipo para seguir dando forma, entre todos, a este nuevo proyecto diocesano.
Delegación de Apostolado Seglar
