Carta Pastoral de Mons. Ramón del Hoyo en la Jornada Mundial de la Paz, que celebramos el 1 de enero de 2011.
Queridos fieles diocesanos:
Cada año el Papa envía a los fieles de toda la Iglesia un Mensaje para la celebración de esta Jornada en el día de Año Nuevo.
Su Santidad Benedicto XVI nos habla, en este año, sobre LA LIBERTAD RELIGIOSA, CAMINO PARA LA PAZ.
Nos felicita en el comienzo de este nuevo año y desea para todos los hombres: serenidad, prosperidad y, sobre todo, la paz.
Lamenta en sus primeras palabras las persecuciones, discriminaciones y los terribles actos de violencia y de intolerancia religiosa del año recién terminado, y se refiere, en concreto, al “vil ataque contra la catedral sirio-católica de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, de Bagdad en que fueron asesinados dos sacerdotes y más de cincuenta fieles durante la celebración de la Santa Misa, el pasado 31 de octubre.”
Agradece vivamente a los gobiernos que se esfuerzan por aliviar los sufrimientos de quienes sufren persecución por sus creencias religiosas a invita a los católicos “a rezar por sus hermanos en la fe, que sufren violencias e intolerancias, a ser solidarios con ellos.”
El documento es tan profundo y ordenado que mi única pretensión, al dirigirles este escrito, es resaltar su importancia y claridad sobre un tema de máxima actualidad. Invitarles, asimismo, para que pudiera ser objeto de estudio y reflexión en círculos de estudio u ocasiones semejantes en parroquias y otras instituciones. Lo encontrarán en la página web del Obispado www.diocesisdejaen.es
Llega a manifestar el Santo Padre que “los cristianos son actualmente el grupo religioso que sufre el mayor número de persecuciones a causa de su fe. Muchos sufren cada día ofensas y viven frecuentemente con miedo por su búsqueda de la verdad, por su fe en Jesucristo y por su sincero llamamiento a que se reconozca la libertad religiosa.”
El Mensaje desarrolla, en catorce apartados, los aspectos fundamentales que inciden en la implantación y vivencia de la libertad religiosa, de toda persona, como derecho fundado en su misma dignidad. Son tan claros y razonados sus planteamientos que puedo asegurarles que su lectura y reflexión te llevan con gozo desde el principio hasta el final y repasar luego los subrayados de máximo interés.
Se observa que el propósito que conduce todo su Mensaje es invitar y proponer a todos los hombres y mujeres, creyentes y de buena voluntad, a implicarse activamente en la construcción de un mundo “en el que todos puedan profesar libremente su religión y su fe, y vivir su amor a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con toda la mente” (cf. Mt 22, 37).
Pidamos juntos ante el Niño Dios, de forma especial en el primer día del año 2011, como escribe el Papa, “que todos los hombres y sociedades, en todos los ámbitos y ángulos de la tierra, puedan experimentar pronto la libertad religiosa, camino para la paz.”
Que la Virgen Madre, Reina de la paz y de la justicia, nos conduzca de su mano y bajo su protección, para que seamos siempre dóciles a la voz del Espíritu y constructores de amor y de paz.
Para todos, con gozo y esperanza, ¡Feliz Año Nuevo!
+ Ramón del Hoyo López
Obispo de Jaén