La fiesta de la Presentación de Señor en el Templo, el pasado 2 de febrero, reunió en la Parroquia de San Pedro de la localidad de Mengíbar a un grupo numeroso de fieles, entre niños y familiares, para participar en la tradicional fiesta de la Candelaria, donde son presentados ante la Virgen los niños que han sido bautizados durante el pasado año 2017.
La celebración comenzó con la bendición de las candelas (cirios) para la procesión con la antigua Virgen de la Cabeza, la talla más antigua de la localidad, datada en el siglo XVI, que llevaba dos palomas y que fue porteada alrededor del hermoso templo renacentista por los padres de los niños bautizados. También la imagen de la Virgen llevaba su candela encendida. La tradición popular de Mengíbar cuenta que si este cirio entra encendido en templo será buen año, y así ha sido.
En la homilía, que pronunció el párroco de San Pedro y Delegado Episcopal de Liturgia, D. Antonio Lara Polaina, explicó el pasaje Evangélico de la Presentación en el Templo y dirigió unas cariñosas palabras a los padres y abuelos de los niños bautizados en el último año. Al finalizar, los pequeños fueron presentados ante la Virgen y bendecidos.
Al concluir la celebración religiosa, tuvo lugar el tradicional acto de convivencia, delante de la Casa de Hermandad de la Virgen de la Cabeza, con las familias, al calor de la candela, compartiendo momentos de fe y las tradicionales palomitas y vino dulce, además de las viandas y los típicos dulces que el Grupo de Matrimonios de la parroquia, la Cofradía y los fieles habían traído para compartir. Un acto fraterno, de comunión y convivencia entre las familias de la parroquia, que se alargó hasta entrada la madrugada.