Los feligreses de Cambil y Arbuniel estamos convencidos de nuestra fe y del proyecto que quiere realizar Dios en nuestras vidas y nuestras comunidades. Ha llegado a nuestras parroquias una importante y gran visita, que es la Santa Cruz de la Misión diocesana.
El día 1 de febrero, a las once de la mañana, estuvimos muy alegres en Cambil. Nos encontramos todos, como verdaderos hermanos en la fe, en el lugar conocido como La Moraleda, donde esperamos, con gran ilusión y alegría cristiana, la llegada de la Santa Cruz, procedente de la parroquia de Huelma. Llegaba el momento de recibir esta importante visita. La esperábamos, junto con el párroco, Don Roberto. Cuando la vimos llegar todos, a una voz, gritamos: ¡que viva la Santa Cruz! Así, le dimos la bienvenida y rezamos la oración por la Misión. Posteriormente, iniciamos nuestro camino hacia el templo parroquial, donde adoramos al Santísimo Sacramento del altar y veneramos la Santa Cruz.
Ya en las horas de la tarde la despedimos de Cambil, para que la Cruz iniciara su recorrido a la parroquia San Juan Bautista de Arbuniel.
A los feligreses de Arbuniel, también, nos hizo mucha ilusión esta maravillosa visita. Nuestro recibimiento fue directamente en el templo parroquial, ya que la fuerte lluvia nos impidió recibirla en el lugar programado. Sin embargo, eso no fue impedimento para que nuestros feligreses -niños, jóvenes y adultos- nos congregáramos en torno al Santísimo Sacramento y a la Santa Cruz, para realizar un hermoso momento de oración, reflexión y meditación de lo importante que es la Misión diocesana que hemos iniciado en nuestra Iglesia particular.
Estamos convencidos que esta Misión tendrá frutos abundantes de conversión del perdón. Nosotros nos comprometemos a seguir en oración, por el buen desarrollo de la Santa Misión.
Parroquias de Cambil y Arbuniel
