El pasado 26 de febrero, primer domingo de Cuaresma, 28 niños y tres adultos, procedentes de diversas parroquias de la Diócesis, participaron en el rito de la elección de catecúmenos.
La Eucaristía, que tenía lugar, a las 18 horas, en la S. I. Catedral de Jaén, comenzó con la procesión de entrada, encabezada por los catecúmenos, que eran acogidos, así, por la asamblea.
La celebración estuvo presidida por el Obispo, Don Sebastián Chico Martínez, y concelebrada por el Delegado de Catecumenado, D. Jesús Díez del Corral; los Canónigos D. Emilio Samaniego y D. Manuel Carmona; el párroco de la Inmaculada Concepción de Canena, D. Sebastián Moreno; párroco de Santiago Apóstol de Jaén, D. José Antonio Maroto; y el párroco de la Divina Pastora de Andújar, D. Manuel Botet (CM).
Los catequistas y familiares fueron los encargados de las lecturas y la oración de los fieles. El Evangelio fue proclamado por D. Sebastián Moreno.
Homilía
Don Sebastián comenzó su homilía dirigiéndose a los catecúmenos para recordarles que “la Iglesia de Jaén se siente muy dichosa y se siente muy contenta porque estáis aquí. Y estáis dispuestos a recibir ese gran regalo que es el Sacramento del Bautismo, por el que entraréis a formar parte de la Iglesia”. “Una familia hermosa, una familia que vive como los hijos de Dios y una familia que siente la fuerza del Espíritu Santo, esa fortaleza que nos da el Señor”, continuaba.
El Obispo quiso tener, también, unas palabras para los catequistas, los padrinos y especialmente para los padres, a los que quiso felicitar por esa decisión, “porque es un regalo, es un don lo que van a recibir vuestros hijos y estoy convencido de que vosotros queréis lo mejor para ellos. Y lo mejor para ellos es que estén cerca del Señor, que estén lo más cerca posible de Dios, de aquel que nos da la vida”.
Haciendo referencia al Evangelio, el Obispo quiso pedir al Señor, que nos ayude a discernir donde está el mal en este mundo y nos ayude a no caer en la tentación. “Para eso le pedimos la fuerza de su Espíritu. Le pedimos la fuerza que brota del árbol de la cruz, que es el Espíritu Santo, que vais a recibir a través de las de los sacramentos de iniciación cristiana”. Y para finalizar añadió: “qué alegría estar esta tarde aquí junto a vosotros y poderos llamar para ser elegidos, y que a partir de ahora os preparéis para recibir, dentro de poco, el gran Sacramento del Bautismo”.
Rito de elección
Posteriormente, tras ser presentados al Obispo, por D. Jesús Díez del Corral, los catecúmenos subieron al altar, acompañados de sus padrinos y catequistas. Allí fueron interrogados y exhortados por el Pastor diocesano.
Posteriormente, el Delegado para el Catecumenado entrega la lista de los nombres de los postulantes al Obispo, que la introduce en el libro de los catecúmenos.
Don Sebastián finalizaba dirigiéndose a ellos: “queridos catecúmenos, declaro con alegría que habéis sido elegidos para ser iniciados en los sagrados misterios durante las próximas fiestas de Pascua”. “Ahora es vuestro deber, como el de todos nosotros, que os esforcéis con todo entusiasmo en llegar a la plena verdad de vuestra elección”.
Tras la oración de los fieles, Don Sebastián despidió a los elegidos, que abandonaron la asamblea. La Eucaristía continuaba como de costumbre.
El Prelado quiso culminar felicitando a los padres, padrinos y catequistas. A estos últimos, además, quiso animarlos en la tarea tan hermosa que están desarrollando.
Al término de la celebración, los catecúmenos volvieron al templo para posar, junto al Obispo y los sacerdotes, en una foto de familia, tras la que recibieron un emotivo aplauso.
Posteriormente, los tres adultos pudieron saludar y departir tranquilamente con el Obispo, que quiso felicitarlos, una vez más, por ese paso tan importante que van a dar próximamente.