La alegría de la resurrección se celebra solemnemente en la Catedral

Diócesis de Jaén
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La diócesis de Jaén es una iglesia particular española sufragánea de la archidiócesis de Granada. Sus sedes son la Catedral de la Asunción de Jaén y Catedral de la Natividad de Nuestra Señora de Baeza.

A la hora del rezo del Regina Coeli, daba comienzo la solemne Eucaristía del domingo de Pascua en la Catedral de Jaén.

Presidida por el Obispo diocesano, Don Amadeo Rodríguez Magro y concelebrada por el Vicario General y Deán de la S.I. Catedral, D. Francisco Juan Martínez Rojas y otros canónigos, fueron muchos los fieles que quisieron celebrar la Resurrección del Señor en el primer Templo de la Diócesis.

Después de incensar el Cirio Pascual, que lucirá encendido en el presbiterio hasta el día de Pentecostés, asperjó con agua bendita a los presentes, para así rememorar que con su bautizo nacieron a la vida nueva.

Las lecturas fueron participadas por ministros extraordinarios de la Comunión que colaboran asiduamente con el Cabildo Catedral. El Evangelio lo proclamó el Deán, Martínez Rojas.

El Obispo comenzaba su homilía felicitando a los presentes por la Pascua de Resurrección. Para más tarde destacar que «la Pascua trae consigo la alegría». En este sentido, Don Amadeo explicó, que a pesar de los momentos personales en los que nos encontremos, de los momentos de dolor y de sufrimiento…»La Pascua de la Resurrección tiene que prender en nosotros la chispa de la alegría y de la esperanza en Cristo resucitado». Para seguir explicando que en eso consiste nuestra fe: «en descubrir a Cristo como nuestra vida. Y descubrir a Cristo resucitado. Cristo tiene para mí un futuro lleno de esperanza».

Don Amadeo ha recordado en su predicación que fueron las mujeres las primeras que encontraron el sepulcro vacío, para después contárselo a los discípulos del Maestro. En este sentido, el Prelado ha destaco que» Juan viendo el sepulcro vacío, vio y creyó. Supo lo que significaba el sepulcro vacío. Se había cumplido todo en la persona de Jesucristo».

Para concluir, Don Amadeo ha puesto de relieve que «Saber que Cristo ha resucitado es creer, que Cristo vive y vive en mí. Creer que Cristo ha resucitado para ser la luz del mundo. Hoy es el día grande. El día del amor, porque la fe nace por el amor».

La Eucaristía estuvo acompañada por las voces de la Escolanía de la Catedral que dirige Cristina García de la Torre.

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