El pasado viernes, 30 de junio, Solemnidad de San Pedro y San Pablo, se celebraba, en el templo del Sagrario de la Santa Iglesia Catedral, la Eucaristía con motivo de la clausura del presente curso pastoral en la curia diocesana.
Dicha Eucaristía, que comenzaba a las 13 horas, estuvo presidida por el Sr. Obispo, D. Ramón del Hoyo, y concelebrada por el Sr. Vicario General, D. José Antonio Maroto; y el Sr. Deán, Francisco Juan Martínez Rojas.
Asistieron además, muchos de los vicarios y delegados episcopales, así como los trabadores de la curia diocesana.
Durante su homilía el Sr. Obispo quiso destacar el trabajo realizado por la curia diocesana a lo largo de este curso pastoral. «Hemos tratado de trabajar a favor de los servicios pastorales de nuestra Iglesia en sus distintas áreas, al servicio de todos los fieles diocesanos. En todo momento, cada día, hemos invocado y contado con la ayuda del Señor, y es lógico que, como creyentes agradecidos, lo expresamos en esta Eucaristía desde lo más profundo de nuestro corazón. Él sabe hasta dónde hemos sido sus siervos fieles o no a los talentos que ha puesto en nuestras manos. Seguro que nos disculpará de los fallos que hayamos cometido cada uno, al leer en nuestros corazones que le queremos y estamos a su disposición. Dios, sin duda, nos sonríe viendo nuestra pobreza generosa. Lo que hemos plantado y regado lo ponemos en sus manos, para que produzca frutos a su tiempo. Gracias también, por mi parte, a cada una de las personas que formamos la familia de la Curia.
D. Ramón expresó, además, su más sincero agradecimiento en favor de Dª Encarnación Molina Medina. «Después de sus servicios generosos y gratuitos durante los últimos seis años, en el Archivo, Biblioteca y Hemeroteca de la Curia diocesana, ha solicitado su relevo por razones bien fundadas. Sé que es insuficiente y muy difícil de expresar con palabras el agradecimiento de la Diócesis a su persona y a la Institución Teresiana por su ejemplar dedicación en estos servicios. Nunca se lo podremos pagar, pero sí lo hará el Señor y con creces. En su curriculum de cristiana constará ya para siempre: serví a la Curia de mi Iglesia por seis años con alegría y dedicación sin esperar nada, lo hice por amor».
Asimismo, el Sr. Obispo mostró su apoyo a D. Rafael Higueras, ante el reciente fallecimiento de su hermana. «Nos unimos a nuestro hermano Sacerdote Mons. Rafael Higueras, en estos momentos tan especiales de dolor, ante el reciente fallecimiento de su difunta hermana Dª Laura (q.e.p.d.). La ha acompañado y cuidado de forma ejemplar y, al tiempo que suplicamos al Señor su eterno descanso, sepa D. Rafael que la familia de la Curia le acompaña. No se sienta solo».
Tras la eucaristía, tuvo lugar un aperitivo fraternal entre los miembros de la curia diocesana.
