El pasado 7 de octubre, se celebró en la Iglesia Conventual de las Madres Dominicas la Solemne Función Principal en honor a Nuestra Señora del Rosario con motivo de su festividad, participando en dicha celebración las Madres Dominicas, la Cofradía del Rosario, la Hermandad de la Piedad y Estrella, la Orden Terciaria Dominica y los devotos de Nuestra Madre del Rosario.
Con motivo de dicha solemnidad y coincidiendo con la celebración durante éste año del Ochocientos Aniversario de la Fundación de la Orden Dominica por Santo Domingo de Guzmán ofició la Solemne Eucaristía nuestro obispo, Don Amadeo Rodríguez Magro, acompañado en el altar por Don José Casaña Llagostera, capellán de la Iglesia Conventual de la Purísima Concepción, y Don Blas Pegalajar González, capellán de la Hermandad de la Piedad y Estrella.
Don Amadeo, en su homilía, habló de la importancia del rezo del Santo Rosario en la vida de todos los cristianos y de la importantísima fuerza mediadora de María, Madre de Cristo y Madre Nuestra, entre Dios Padre y sus hijos en la tierra.
Es la primera vez que Don Amadeo visitaba a las Madres Dominicas desde que fue nombrado Obispo de Jaén, quedando prendado de la belleza de Nuestra Señora del Rosario.
Acompañado de un nutrido grupo de hermanos, pudo contemplar en su propia capilla a los titulares de la Hermandad de la Piedad y Estrella, mientras el Hermano Mayor le explicaba la historia de la misma y las distintas actividades y cultos que la Hermandad celebra durante todo el año.